¡Qué miedo!

  • Guadalupe Carrasco
El formato fue diferente y las preguntas de los tres moderadores claras y directas

A propósito del reciente debate entre los cinco candidatos a la presidencia de México y la ausencia de propuestas.

Mi querido diccionario de Etimologías Grecolatinas dice:

debate ‘discusión, disputa, controversia’, francés antiguo debat (francés débat) ‘discusión; controversia; contienda’, de debattre, debatre ‘luchar’, de de-  ‘separados; contra’ (del latín de- ‘separados; contra’; véanse de-, + battre, batre ‘luchar; golpear’, del latín battere, battuere ‘luchar; golpear’ (véase batir).  Fuente: Breve Diccionario Etimológico de la Lengua Española.

En el marco de las elecciones a presidente de la República Mexicana para el periodo 2018-2024, el INE organizó el primer debate de la temporada llevado a cabo el domingo veintidós de abril. El formato fue diferente y las preguntas de los tres moderadores claras y directas. Digamos que realmente hicieron su tarea.

Por otro lado, los candidatos cumplieron a cabalidad con su papel de actores del debate:  discutiendo, luchando, manteniendo la abismal separación,  golpeando al contrincante, acusándolo y tratando de mantenerlo en la lona.

Ciento veinte minutos de cuestionamientos frontales por parte de los periodistas pero de respuestas evasivas, tediosas, incompletas y únicamente dirigidas a atacar y evidenciar, presentando “pruebas”, láminas, datos incompletos, falseados o tendenciosos (interesante labor del sitio VerificadoMx que realizó un análisis de las declaraciones y acusaciones sacando a la luz la veracidad o falsedad de gran parte de las aseveraciones vertidas), y defendiéndose a cada oportunidad (la mayoría de ellos). ¿Y las propuestas? ¿Caben en un debate? Yo creía que sí, que de eso se trataba un debate, pero las pocas que escuchamos sólo entran en una categoría de afirmaciones que no exponen el cómo y en momentos, ni el qué.

Pensemos un poco en el tema de la corrupción. Una propuesta: No tolerar la corrupción. ¿Cómo? ¿Qué medidas se tendrían que tomar para no tolerar la corrupción? ¿Qué leyes y modificaciones a códigos, normas y procedimientos se tendrían que aprobar en el Congreso? ¿Qué instituciones se crearían? ¿Qué medidas de control y vigilancia tendrían que implementarse? ¿Qué nuevas sanciones se añadirían? ¿Cómo se vigilaría a los ciudadanos y a los servidores públicos para que no incurran en esta práctica? ¿Qué tan rápidos serían los procesos para acusar a alguien de actos de corrupción? ¿Quiénes serían responsables del mismo? ¿Cómo se garantizaría que todos los corruptos sean castigados? ¿Cómo evitar el nepotismo? ¿Las “palancas”? ¿Los favores políticos? ¿El pago de deudas de campaña? ¿Qué trabajo de inteligencia se tendría que realizar para que no haya fallas en los procedimientos? ¿Cómo tener jueces que realmente trabajen a favor de la justicia y no sean presas de la corrupción o de la extorsión? ¿Cómo modificar la Ley de Amparo para que no sea el as bajo la manga que usan los delincuentes para librarse de la ley? Aquí sólo escribí algunas preguntas acerca de la corrupción, sin embargo los temas difíciles están a cada paso: la delincuencia, la impunidad, la pobreza, la contaminación, la economía, la educación, etcétera.

Definitivamente hay mucho que debe ser aclarado por los cuatro candidatos y la candidata, aunque honestamente dudo que tengan un plan concienzudo y eficaz para cada tema que concierne a la persona que próximamente dirigirá este país.

Por otro lado, el formato del debate permitía a los candidatos defenderse de los ataques apelando a su buen juicio. Lo hacían bien, lo hacían mal, no lo hacían. Lo más claro era que aprovechaban cada oportunidad para volver a atacar. Lo que faltó en el debate fue el diálogo, por eso yo propongo que en lugar de llamarse debate, debería llamarse diálogo, palabra con mayor compromiso y más responsabilidad para los participantes pues se trata de un llamado a la razón y no una invitación a la lucha y a la diatriba.

Fuentes:

Gómez de Silva, Guido. 1995. Breve Diccionario Etimológico de la Lengua Española. Editorial El Colegio de México y Fondo de Cultura Económica. 2ª Edición. México.

VerificadoMx. Sitio de internet. https://verificado.mx/candidatos-corrupcion-impunidad-frases-primer-debate-presidencial/ Consultado el 24 de abril de 2018.

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Guadalupe Carrasco

Licenciatura en Psicología de la Universidad de Londres. Psicoterapeuta en consulta privada, Orientadora Educativa