CORTINAS DE HUMO

  • Humberto Fernández de Lara Cajica
La cortina de humo es una metáfora que tiene su origen desde las primeras batalles militares...

Las cortinas de humo han sido presentadas por diversos gobiernos del mundo y los gobiernos mexicanos no han sido la excepción. Estas distracciones son diseñadas y preparadas antes de mostrarse al público, o bien pueden establecerse de forma casual ante una declaración o acción de un poder público, que al mismo tiempo se aprovecha el error o la ocurrencia para disfrazar o distraer una o varias realidades de mayor trascendencia o impacto social.

La cortina de humo es una metáfora que tiene su origen desde las primeras batalles militares o campales de la historia, en donde el adversario engañaba al contrincante. Fiel al concepto en cuestión, la literatura nos remonta a principios del siglo XX en la primera guerra mundial donde los automóviles eran precedidos por una nublada cortina de humo que camuflaba sorprendiendo al rival.  

Otra de miles e interesantes cortinas de humo en la historia también fue durante la segunda guerra mundial. Estados Unidos creó un ataque secreto con el famoso “Ejército Fantasma”, en suelos europeos, usando ilusiones para confundir a los nazis. El engaño fue tan contundente que ganaron una batalla estratégica, causando que los alemanes creyeran en tanques, muñecos y sonidos artificiales fabricados por Hollywood. 

El concepto también se popularizo cuando lo llevaron a la pantalla grande en la pelicula “La Cortina de Humo” o “Wag the Dog” con Dustin Hoffman. Éste actor encarnó a un productor de Hollywood para maquillar una supuesta guerra contra Albania, distrayendo a los ciudadanos de un escándalo sexual que protagonizaba el presidente en turno.

En México y en la historia reciente nos acordamos de casos claros de cortinas como “El Chupacabras”, entre otros. Estas prácticas también pueden confundirse con una noticia superficial; la clave está en que los ciudadanos y los medios de comunicación no se enfrasquen en temas superfluos sin descuidar las opiniones de temas trascendentes. Para la jiribilla creativa en diversos medios es prudente cualquier cortina, sin embargo, no es útil para una sociedad democrática y participativa resistirse y olvidar la coyuntura. Hay que estar atentos.

El avión presidencial lleva meses en venta. No ha sido fácil venderlo por el costo de adquisición, o más bien porque amerita una configuración distinta; y resulta que al gobierno le ha significado un alto costo mantenerlo. El presidente, durante su campaña comentó que vendería el avión y la sorpresa se la llevo después. Siempre es más sencillo hablar que hacer y en eso se ha caracterizado el representante del Ejecutivo. No solo respecto al avión, sino que otros temas también han quedado a la deriva.

El día martes veintiocho en su conferencia de prensa mañanera expuso con toda seguridad y seriedad desde su óptica, que lo rifará si es que no se puede vender. Ese mismo día presento una imagen sin ser meme (aunque no lo crea), de cómo quedaría el boleto de la Lotería Nacional con el avión.

Durante el esclarecimiento de esta cortina de humo, podemos tomar la situación como punto de partida respecto a lo complejo que es gobernar. Lo cierto es que AMLO se creyó algunas de sus propias mentiras, otras simplemente las dijo sabiendo que se ganaría la voluntad ciudadana con una demagogia magistral.

El caso del avión tuvo un impacto positivo en lo social y electoral, con el mensaje de que existiría un poder austero y no gobierno rico con pueblo pobre. Fue una propuesta, un símbolo que no ha logrado materializarse y que, al mismo tiempo, en su defecto, lo ha utilizado para distraer la atención seria de la gente con ocurrencias y burlas.

Otra cortina de humo que esta por presentarse es la eliminación de los puentes vacacionales. El titular del ejecutivo declaró que habrá nuevas reformas a la ley para terminar con las festividades en ausencia académica y laboral. Y mientras sea o no cierto, también es un maquillaje de lo que existe y lo que se avecina.

Entre el presidente y los medios de comunicación deben asumir un rol más responsable con los ciudadanos y aislar lo trivial. Es lamentable que en las declaraciones mañaneras y en otras vías el presidente ponga sobre la mesa ocurrencias, vulnerando la investidura presidencial, acercándose a un monologo cirquero.  

humberto_fernandez_de_lara@hotmail.com

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Humberto Fernández de Lara Cajica

Licenciado en Derecho Ibero Puebla. Maestro en Gobierno y Administración BUAP. Es Notario Público Auxiliar. Presidente de la Fundación Colosio en el Estado de Puebla