En julio del año pasado, las autoridades federales imputaron a Rosario Robles, exservidora pública de alto rango, por ejercicio indebido, traducido popularmente como la “Estafa Maestra”, misma que se le conoce como un fraude magno que involucro a dependencias y funcionarios de gobierno por montos de miles de millones de pesos.  

En medio del proceso jurídico de la ex secretaria de Desarrollo Social, su abogado piensa utilizar el criterio de oportunidad. Este criterio es una excepción característica para no ejercer acción penal, en virtud de que la Fiscalía ofrece la oportunidad con el fin de facilitar el esclarecimiento de la investigación.  

En ese sentido, Rosario Robles, adelantó que aprovechará el criterio para denunciar a Luis Videgaray por el presunto desvío de recursos, destinados al partido político de la administración anterior. El proceso sigue su curso y hasta hoy parece ser que las próximas acusaciones tendrán tintes políticos contra el Partido Revolucionario Institucional. 

Si bien es cierto que en gobiernos del PRI y de otros partidos políticos que han estado en el poder, cometieron actos ilícitos, la presunción actual de que los recursos desviados de ese entonces para la campaña del 2012 y 2018 son objetables. Por tal razón, los recursos fueron cabalmente fiscalizados por las autoridades electorales, y a propósito la campaña presidencial del 2018 en torno al candidato priista fue distinguida por ser la más transparente. 

Hace unos días, el Comité Ejecutivo Nacional del PRI extendió un comunicado, en donde el partido se deslinda de cualquier actividad ilícita de gobiernos pasados. Con esta premisa el instituto político actuó con anticipación, al mencionar también que estarán abiertos a las investigaciones con el objeto de auxiliar al esclarecimiento de los hechos. 

Próximamente estaremos viendo un espectáculo mediático de la exservidora pública, queriendo culpar a otros funcionarios. El problema no radica en señalar a otros actores, sino en la ausencia de pruebas y vaguedades, porque la contundencia permite sospechar ampliamente sin ninguna objeción inmediata, como fue el tema de los recursos desviados a favor del PRI, que para ello las autoridades electorales verificaron y avalaron en materia de transparencia.