Siempre me ha parecido el mundo del vino y la política, unos mundos paralelos pero complementarios, en la casa siempre crecimos con ellos, en la comida y las tertulias diarias, estaban los periódicos y la copa de vino de mi padre, así crecí, y así se despertó el interés por ambas en mí.

La semana pasada tuve por primera vez en mi vida, la fortuna de asistir al Prowein, en Dusseldorf;  para los que no saben, es la feria más importante de vino del mundo, te encuentras con todos los tipos de proyectos que existen, me llamo poderosamente la atención que Chile y Argentina, han tomado la valiosa decisión de dejar de ser entry level wine, este es un vino barato que va dirigido a súper mercado, en el que la calidad es lo de menos, tiene que ser un vino barato, corriente, tomable y que el margen sea pequeño pero en volumen, se convierta atractivo.

Posiblemente el ejemplo mas importante sea Casillero del Diablo, ojo son proyectos validos y que alguien tiene que hacer, no es fácil posicionar una etiqueta, sea cual sea el mercado.

Tomar la decisión de dejar de ser el vino barato de supermercado, no se toma de la noche a la mañana, se tiene que recurrir a enólogos, tecnología, lleva años, a veces décadas, en que la gente y la crítica te empiece a tomar en serio, en el mundo del vino hay filtros muy conocidos como Robert Parker, que tardan años en darle una buena crítica a este tipo de vinos, en su mayoría todos los entry level wine, mueren siendo vinos de bajo costo de súper mercado, ahí el valor y el reconocimiento a los productores, Chilenos y Argentinos.

En la política mexicana y especialmente la poblana, nos topamos con un montón de políticos entry level, esos políticos, corrientes, que cambian de partido como de calzones, que son simpaticones, fáciles de digerir, pero cuando hay que tomarlos en serio, nada mas se quedan en el camino.

En este ramo el Casillero del Diablo Poblano, sin lugar a dudas es el Cholulteca José Juan Espinoza, un político que trato de la noche a la mañana dejar de tener un Rancho en Atlixco, para convertirlo en un Château Grand Cru, cuando su mayor virtud, a pasado por estar en las coyunturas políticas y siempre tomar el camino adecuado, lo hizo cuando se apropio del Partido Movimiento Ciudadano, cuando se le atravesó Rafael Moreno Valle y fue con él, su última coyuntura electoral, se dió en el pasado Julio, con MORENA, por vía del PT, consiguió la Diputación Local, ahí empezó su camino que le ofreció MORENA, de dejar de ser el político entry level, para convertirse en un político digno de tomarse en cuenta, empezó bien, lucho junto con Miguel Barbosa, por la Gubernatura, hasta las ultimas consecuencias, Presidio el Congreso, siendo oposición, bastante bien, pero que paso? Cuando el destino le cambio, el rumbo a Puebla y le tocaba ser Gobierno, someterse y aceptar que había por ahora unos perfiles que para la dirigencia y el Presidente, se merecían repetir en la boleta electoral, salió el José Juan, que todos conocemos, el JJ entry level, el mismo que ofende en redes sociales, ensucia procesos, se hace el ofendido y no sabe hacer Gobierno, su Enólogo de cabecera, Ricardo Monreal, sabiendo que le conviene para sus beneplácitos personales agitar el gallinero, le da cuerda, lo acelera y pues esa es la esencia de José Juan, un político entry level, que siempre será eso, nunca estará listo para las grandes encomiendas, las grandes ligas, le quedan lejanas, en la vida y más en la política siempre existen sorpresas y a ningún político hay que dar por muerto, pero como diríamos en el mundo del vino, este vino no da para más.