La psicosis digital de los poblanos
- Martha Reyes
El jueves pasado un mensaje de Whats App se viralizó entre los poblanos, la alerta de que estaban asaltando a mano armada a los autos que transitaban por la 31 sur y 31 poniente comenzó desde las 3 de la tarde, a mi whats la información llegó a través de cuatro grupos, casi al mismo tiempo. Al compartirlo, los amigos lo acompañaban con las recomendaciones normales de “cuídense”, “no transiten por ahí”, “Puebla está cada vez más inseguro”, etc.
La reacción de psicosis tiene lógica, en la realidad, cada vez no enteramos de más robos y asaltos en Puebla, leerlo en redes sociales confirmaba el estatus de inseguridad que vivimos.
El mensaje se extendió a tal grado que de Whats App brincó a Twitter, donde algunos comunicadores poblanos tuiteaban la “noticia”, todo indicaba que los asaltos a mano armada seguían sucediendo desde casi las 3 de la tarde, hasta las 8 de la noche, qué extraño - pensé- ya había pasado mucho tiempo y ¿ nadie hacía nada para frenar estos atracos?.
Una nota de El Sol de Puebla desmentía la noticia, ya que uno de sus reporteros indagó en el lugar de los hechos y ninguno de los vecinos sabía de los atracos.
Como a eso de las 8 de la noche, la Secretaría de Seguridad informaba mediante su cuenta de Twitter, que el mensaje difundido en redes sociales era falso, que eso no había sucedido, que no tenían reportes del caso.
El hecho es interesante por varios factores, quienes compartieron el mensaje no se detuvieron a confirmar la veracidad de la información, ni siquiera los periodistas que de forma irresponsable tuiteaban como si fuera una noticia real, sin detenerse a confirmar la información, las autoridades dejaron un vacío informativo por algunas horas, lo que propició el crecimiento del rumor, pues nadie negaba la “noticia” que algunos medios habían difundido mediante redes sociales.
Pocos fueron los ciudadanos que identificaron el tuit de aclaración de la Secretaria, así que la mayoría se quedaron convencidos de que los asaltos fueron ciertos. Vivimos una época en que las redes sociales pueden trasmitir una mentira disfrazada de elementos verídicos y sólo pocos, muy pocos, logran identificar la verdad.
En este caso se confirmó que ni las autoridades, ni los medios de comunicación y mucho menos los ciudadanos sabemos utilizar las redes sociales con responsabilidad en temas ciudadanos, nunca dudamos de la veracidad de la información, creemos que todo es cierto y viralizamos sin ninguna certeza.
Nos hemos convertido en un blanco perfecto, fácil de influenciar, porque nosotros los usuarios, no hemos entendido del peligro de creernos todo lo que se publica en redes sociales, no estamos acostumbrados a dudar, a indagar qué es verdad y qué es mentira, somos una sociedad indefensa ante nuestra falta de costumbre de analizar la información digital y sus efectos.
¿Qué necesitamos para saber utilizar correctamente la información en redes sociales, para identificar qué es verdad y qué mentira, saber en qué momento nos manipulan?
Opinion para Interiores:
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Periodista especializada en temas de tecnología desde hace 20 años