Cuando comenzó a hablarse en Francia de la despolitización, a mediados de los 50, se enfocaba la tendencia ciudadana a criticar a los gobiernos y partidos, así como a las élites políticas en general. Llevada al extremo, para muchos ‘lo político’ se terminó convirtiendo en ‘el mal’. En cierta forma fue una proyección del esquema maniqueo de la Modernidad. Pero hoy estamos desbordando los límites de la despolitización. En la escuela francesa se vinculaba la despolitización con una acción refractaria hacia lo político. Pero al entrar la ciudadanía en la competencia por el poder, se convertía en ‘política’. Si lo vemos bien, la globalización nos está mostrando la otra cara de la despolitización…

¿Qué pasaría si, además de la confrontación entre políticos y ciudadanos, hubiese otra despolitización al interior de los gobiernos, partidos y élites políticas? Hoy vivimos la ‘despolitización intrapolítica’. Lo vemos en España, México, Venezuela, Chile, Brasil, Colombia y en muchos países más, aunque con sus modalidades específicas…

“El disenso despolitizador…”

En España, el 20 de diciembre todos quedaron muy por debajo del 40% de los votos. Pero si alguien creía que eso era todo, se ha sumado la ruptura del consenso al interior de las élites. Lo acabamos de ver en la votación interna del PSOE para decidir el respaldo al pacto con Ciudadanos. Votó la mitad de la militancia, logrando Pedro Sánchez el 75% de respaldo. El resultado es legítimo y sin duda es un triunfo para él. Pero considerando que hablamos del 50% del padrón socialista, ¿qué significa ese 75% frente al total? Eso nos da la dimensión real del consenso alcanzado el sábado: la mayoría del PSOE o sufragó en contra o no tuvo interés en participar…

Susana Díaz y los ‘barones’ entendieron que la mejor decisión era apoyar a Sánchez para no pagar los costes de un descalabro, del cual los culparía, y aprovecharon para enviarle un mensaje. Lo dijeron los ‘barones’ el mismo día: “No es un cheque en blanco y hay límites”. Susana fue más allá al tronar contra el proyecto de desaparecer las diputaciones provinciales, lo que implicaría desmantelar el poder territorial de los ‘barones’. La estrategia asumida es digna de sopesarse: movilizar sólo las estructuras de votantes suficientes para sacar adelante el ‘sí’ y de no lograr la investidura, que paguen los costes el PP, Podemos y los que opten por el ‘no’ a la hora de investir…

Fernando de Páramo (Ciudadanos) volvió a tender la mano al PP y declaró que están contentos con el resultado en el PSOE, pero previeron que Sánchez pedirá el aval a su Comité Federal para negociar con Podemos y podría “entregarle hasta la camisa”. En la víspera, Albert Rivera dijo que de no darse la investidura a la primera, reconsiderará su apoyo a Sánchez. César Luena (PSOE) entendió el peso real del ‘sí’ sabatino y retó a Pablo  Iglesias a consultar a las bases de Podemos. Expuesto que persiste el disenso en el PSOE, le ‘lanzó la pelota’. Tratando de consolidar la investidura, empujan a la ‘despolitización intrapolítica’ mediante la inoculación del disenso…

En el PP también batallan por el consenso interno. Mariano Rajoy ha pedido a la plana mayor del Partido no cambiar de candidato. María Dolores de Cospedal, parafraseando a San Ignacio de Loyola, ha recordado al PP que: “En tiempos de zozobra, conviene no hacer mudanza”, afirmando que socialistas comentan que el pacto PSOE-Ciudadanos oculta el referéndum catalán. El PP, PSOE, Podemos y nacionalistas están bajo presión y, otra vez, Ciudadanos camina más suelto. Rivera anhela que el disenso polarice a todos y sea su gran oportunidad. Apuesta a adueñarse de la agenda política y requiere que Podemos y el PP descarrilen a Sánchez. La sesión de investidura inicia el martes y se votará el miércoles (2 de marzo). De haber otra, sería el viernes, aunque el PSOE insiste que sea el sábado…

“La geoestrategia populista…”

Algunos afirman que el forcejeo entre Evo Morales y la ciudadanía provocó un efecto geopolítico que llevó a Macri al poder en Argentina, aunque me parece que también pesó la situación política doméstica. Luego del ‘no’ a la reelección de Evo, los sondeos indican que Dilma Rousseff está en el sótano de la opinión pública y Michelle Bachelet anda en las mismas condiciones. Al tiempo de anunciarse un viaje relámpago de Dilma a Chile, Lula expresó su deseo de volver a la Presidencia de Brasil. Lo hizo de manera tan atropellada que no se percató que empujó cuesta abajo a su protegida, pues se entendió como confirmación de la debacle…

El efecto Evo y el naufragio del chavismo anuncian la tempestad que se avecina para el populismo. Desde hace meses, Bachelet ha sido noticia por los escándalos de corrupción y por bailar muy bien, pero no por buenos resultados. Sin duda un tema central es el de los presuntos sobornos de la empresa Odebrecht a gobiernos de América Latina, Europa y África. Dilma propone a Michelle una alianza geoestratégica para enfrentar la emergencia continental y les recuerdo que en Venezuela, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) acaba de realizar un encuentro internacional para impulsar una nueva geopolítica comunicacional, montada sobre movimientos populares…

Para la oposición, Alfredo Serrano (español), director del Centro de Estudios Estratégicos Latinoamericanos de Geopolítica (CELAG), es el vínculo del chavismo con Podemos y principal asesor de Maduro en materia económica. Viendo su perfil, el Bank of America afirmó que Nicolás no va a cumplir con los pagos de la deuda. Los disparates de Maduro potenciaron los efectos negativos de los cometidos por Hugo Chávez, cuyo asesor geopolítico fue el argentino Norberto Ceresole, pensador polémico que lo mismo suscribió ideas peronistas que de izquierdas armadas, de antisemitismo y fascismo. En él tuvieron cabida los extremos ideológicos. Era bien visto por el nacionalismo militarista y por el populismo autoritario. Tuvo buen trato con Salvador Allende y con Castro, especialmente con el aparato de inteligencia cubano. También sirvió como enlace de Hugo Chávez con Irán. Si con alguien se demostró la falsedad de la dicotomía de izquierdas y derechas extremas, fue con él…

La Alianza Bolivariana prevé una embestida geopolítica encabezada por Macri, Uribe, la alianza opositora de Venezuela y sus aliados continentales. Ha cercado al presidente Santos en una especie de juego a dos manos entre las FARC y el ELN, para constituir un polo emergente del populismo. Macri sabe que liderar una estrategia de ese calibre implica sumar más grupos. Por eso visitó al Papa Francisco y le invitó a la Argentina…

El chavismo considera que la avanzada en Venezuela es Capriles y es la razón del asedio y agresiones en su contra. No aceptan que las causas de la crisis generalizada están en el populismo. No cesan los escándalos por presunta corrupción en PDVSA y, pese a lo que se invierte, sigue el desabasto. Niegan permisos comerciales de explotación para forzar préstamos pero sólo hunden más a Venezuela. El reciente por 2 mil millones de dólares no servirá de mucho, considerando que el adeudo a las farmacéuticas supera los 6 mil millones y eso sin sumar la deuda en alimentos, pensiones y salarios…

En otro plano, aumentan las tensiones entre el Frente Institucional Militar y la Guardia Nacional Bolivariana, que busca condicionar los ascensos. La fractura con el ámbito castrense se antoja infranqueable. Los chavistas desean implantar un ‘culto laico’ en torno a Hugo Chávez. Mientras tanto, continúa el ajuste de cuentas entre bandas delictivas, campeando las ejecuciones hasta de agentes de seguridad y del orden…

Cunde el disenso y la alianza opositora debe actuar con inteligencia. El desmoronamiento del chavismo podría ser la oportunidad para reestablecer la democracia, pero con varias dificultades a resolver. Mientras los planes para deshacerse de Maduro siguen su marcha entre los chavistas, con muchos sucesores, la oposición cuenta con 6 o 7 cartas a jugar. Deben pactar las reglas internas para que no los divida la consecución del poder…

“Ruptura en la cúpula…”

Cuando Enrique Peña Nieto asumió la Presidencia de México, las expectativas eran buenas. La posibilidad de reformular la dictadura de partido y sus decisiones erradas o fuera de tiempo, fracturaron a la élite política. Sin tener parte en la desaparición de los 43 normalistas, su gobierno terminó pagando las consecuencias ante la opinión pública. Fue un anacronismo pretender gobernar a la ‘antigüita’ y brotaron los proyectos fundacionales: Beltrones en el PRI, don Máximo en el PAN, López Obrador en MORENA, Mancera en el PRD y Cárdenas en la sociedad civil de izquierdas, más los que se sumen. La profundidad de los cambios indica las posibilidades de rupturas y el disenso se acentúa en el PRI, PAN y PRD, sobre todo. En el PANAL y PVEM, en menor grado. Movimiento Ciudadano ha sabido sortear los riesgos y el PT está más ocupado en mantener su registro, igual que el resto…

Pese a negarlo la PGR, SRE y SEGOB, no será fácil ‘dar vuelta a la página’ en el caso Moreira. De nueva cuenta, El País publicó que Abraham Pérez Daza, funcionario de la embajada en Madrid y hermano de Alfonso, consejero de la Judicatura Federal, fue quien operó para lograr la liberación de Humberto Moreira. El escándalo en España no da señales de disminuir. Incluso El País afirma que la procuradora de México quiso información que le negaron desde allá por la secrecía del caso. Hace referencia a la enorme deuda que dejó en Coahuila y de la maniobra legal para cerrar el caso de manera definitiva. Sin duda, los críticos del gobierno se van a dar un nuevo festín…

Peña Nieto llegó al poder con un resultado parecido al de España, pero en México no se cuenta con segunda vuelta ni negociaciones para constituir gobierno. Debió pactar con tal de ampliar el consenso, pero prefirió pasar de largo. La falta de aval ciudadano explica los ‘linchamientos’ en redes sociales cuando comete algún error. Desde el año pasado, las encuestas registran dos cosas: no remonta y la ciudadanía se resiste a creerle. El candidato que lance el PRI en 2018 deberá contar con capacidad de gobierno pero a la vez con posibilidades de generar confianza y credibilidad. Los líderes opositores van por ese mismo objetivo para ganar. Por si no bastase, siguen los problemas en Veracruz entre el gobernador y los universitarios…

La realidad global contiene tendencias encontradas. Presenta un falso dilema entre conectividad y rupturas. Digo que es ‘falsa’ porque se puede resolver encaminándose hacia un destino común globalizado. Los retos y problemas ya son asunto de todos…

Hasta entonces…

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