¡Mario levántate y anda!

  • Pablo Rangel Sarrelangue

Pareciera que el reciente proceso electoral saco al ex gobernador Mario Marín Torres de la fría tumba en la que el doctor Rafael Moreno Valle Rosas creyó haberlo sepultado.

Ciertamente en la política mexicana nada está escrito y como reza el libro sagrado “por sus hechos los conocerán”, es lo que precisamente ha venido aconteciendo al actual mandatario poblano que aun prevalece en la intención de ignorar, pisotear y menospreciar a quienes hace algunos años le marcaron la entrada triunfal a la Algelopolis y le vieron protestar con júbilo un cargo público que requiere más que la erección de grandes obras, para satisfacer a una sociedad pensante.

La lucha por la llamada “mini gubernatura”, colmará a partir de ahora las planas de los diarios, pues como bien lo consideran muchos, ésta será la plataforma que permita la total resurrección priista, donde el principal obstáculo lo constituye para éstos, la traición.

La presencia relajada y decidida de Mario Marín Torres en la capital y diferentes ciudades del estado es básicamente el regreso a la vida pública del ex mandatario quien ha centrado su trabajo en la concertación y la unidad al seno de un partido donde pulula la ambición, nada nuevo en el PRI, sólo que ahora con una detonante básico de sus correligionarios, han aprendido hacer chantaje.

En efecto hoy casi todos los priistas con ambición a la mini gubernatura se sienten con el capital político suficiente para vencer Antonio Gali Fallad o al que les ponga el gobernador. De algo deben estar ciertos los suspirantes priistas, se requiere más que capital político para la contienda electoral por mini que ésta sea, es decir, se requiere capital económico y en este contexto el único con capacidad para concertar con los empresarios desplazados y menospreciados es Mario Marín Torres, de tal suerte que en nada sirven los grandes padrinos del comité ejecutivo nacional del PRI, cuando don Plutarco cuenta ya con la anuencia del encargado y jefe de la política nacional, pero más aun cuando el ex gobernador conoce ya de las deslealtades y traiciones al seno del revolucionario institucional local.

En efecto el otrora hombre del lunar en la frente sabe perfectamente quienes en los momentos en que su partido hizo agua, corrieron a entregarse a casa Puebla temerosos de diversas acciones legales en su contra, sabe también que el imperio de los Morales es a la postre cosa del pasado y que su vigencia tiene un calificativo denominado lealtad y de ésta pocos, muy pocos dieron cuenta.

De algo estoy cierto quien mejores cuentas ha entregado al resucitado Mario Marín es Alberto Jiménez Merino, sin embargo las capacidades intelectuales poco juego tienen en las contiendas políticas, más aun en el PRI, donde las concertaciones quebrantan cualquier esperanza y contravienen las predicciones del más informado. La caballada en Acción Nacional es de patas frágiles y aun cuando de un andar con garbo ello por si sólo ha fomentado el desprecio social.

En el PRD, la desunión es tal que la única posible candidata con las capacidades suficientes tilda a sus compañeros perredistas de misoginia, no obstante lo cual es claro que el llamado sol azteca habrá de alinearse en su momento procesal oportuno a los intereses del mandatario en turno. Pareciera que los poblanos no están dispuestos a dar al actual mandatario una nueva oportunidad, que lo que se fraguó como duradero romance terminó a causa de una traición la cual pesó aun más que el saqueo al estado, sin embargo hay quienes afirman que la nobleza del estado es tal que dio cabida a otro saqueo pero mejor pensado. Como quiera que sea, no hay duda, Mario Plutarco Marín Torres, se levantó y anda por todo el estado haciendo política.

Jurídico_rangel@hotmail.com

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Pablo Rangel Sarrelangue

Abogado por la Benemerita Universidad Autonoma de Puebla, Maestro en Derecho Penal por la Universidad Autonoma de Tlaxcala, Ex-Secretario de Juzgado de  Distrito de Tribunal Colegiado y Tribunal Unitario en el Poder Judicial de la Federacion