El pasado miércoles 3 de abril de 2013 se publicó en la Gaceta Parlamentaria, instrumento de comunicación oficial de la Cámara de Diputados, el documento presentado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público por medio de lo cual se dio cumplimiento a lo ordenado por el artículo 42 fracción I de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.

En dicha publicación se incluyeron los principales objetivos para la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos 2014, el escenario sobre las principales variables macroeconómicas para dicho ejercicio relativas al crecimiento, inflación, tasa de interés y precio del petróleo, los escenarios sobre el monto total del Presupuesto de Egresos y su déficit –le Ley reconoce la posibilidad de superávit que en la práctica acontece durante algún mes, pero no de forma sostenida durante la totalidad del ejercicio fiscal-, así como la enumeración de los programas prioritarios y sus montos.

Sin presencia mediática, la información contenida en esta publicación pasó desapercibida. Para el mes de septiembre del año actual, al resumen de indicadores macroeconómicos 2012, proyecciones 2013 y 2014, se sumó al documento titulado Criterios de Política Económica, que por mandato del artículo 16 y 42 de la referida norma federal, deben acompañar la Iniciativa de Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos… una vez más la norma jurídica parece preocuparse por indicadores como el crecimiento del Producto Interno Bruto, las variables en torno al precio del crudo mexicano, la inflación, las actividades comerciales internas, el empleo, así como el gasto público.

Debiera entonces ser motivo de interés social que las cifras preliminares indiquen un déficit público de 2.6% del PIB en 2012, una inflación del 3.7% para 2013, con una proyección de déficit público de tan sólo 1.4% del PIB para 2014? Lo anterior en el entendido de que si bien la propuesta inicial del Ejecutivo no era la más adecuada al entorno económico, cuál es la certeza de que con las modificaciones propuestas, en las que parece olvidarse el entorno contemplado en los estudios económicos referidos, se tutelará la proporcionalidad y la equidad en la recaudación para integrar el gasto público? Sólo queda al parecer, voltear la mirada al camino del endeudamiento público.

Endeudamiento o Incremento en las contribuciones que personas físicas y morales debemos enterar, tienen como resultado el destino al gasto público… cierto es que en dichos criterios se reconoce que en 2012 el gasto total del sector público se ubicó en 25.3% del PIB -superior en 3.8% en términos reales al registrado en 2011… probado está que en medio de crisis, déficit, e inflación, el GASTO PÙBLICO no sólo se ejecuta, sino que cada año se incrementa… esto en verdad beneficia a la ciudadanía?

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