Como si lo bizarro nos hiciera falta, dos bodas ligadas a la política captan los reflectores en redes sociales, portales de la socialité y algunos que otros pasquines.

El circo sigue siendo para infortunio nuestro, el mejor distractor en tiempos complicados, donde los escándalos mediáticos y las notas rosas de mediocres circunstancias tratan de opacar el descontento, las críticas, la demanda social y todo lo que se acumula no sólo por hechos fortuitos como las recientes lluvias, sino también por el actuar negligente de políticos y autoridades.

En el colmo de los absurdos, la gran oleada de solidaridad nacional contrasta con esas ráfagas de puro y entero reflector que no sólo los medios de comunicación  han utilizado para los montajes de shows a costa de la tragedia.

Hoy también es válido preguntarnos por los otros shows que montan grandes empresas privadas, organismos, instituciones y lo que se acumule, tratando de quedar bien y haciendo alarde de donativos, que si bien son reales porque pasan “la charola” entre sus empleados, es un hecho que la caravana la hacen con sombrero ajeno.  Los verdaderos dueños de estas grandes empresas, son tan agarrados, que hasta para cooperar le piden primero a sus empleados.

Observando algunas escenas reales, de esas que no se montan por “la señorita Laura”, en los aislados centros de acopio, sí se pudo ver esa solidaridad de la clase media. Aquí entre nosotros, es quizá donde se siente, se sabe, se palpa, lo que cuesta perder un patrimonio.

Por esos lugares, sí desfilaron obreros que con dos bolsas de arroz en mano dejaban su aportación.  Así como uno que otro pensionado que dejó sus tres latas de atún, más que conmovedor, yo diría lastimoso, si vemos la otra realidad.

Me pregunto dónde está el señor Slim?...... y no hablo de Telmex no de su gente, a quienes les pidieron su módica coperacha, hablo del Rey Midas Mexicano y de lo que sale en realidad de su cartera para aportar en momentos complicados.

Será que Azcárraga y Salinas también ¿habrán sacado de su cartera?.

Y si nos vamos a las ligas locales, dónde están los llamados “grandes empresarios poblanos”…..

Algunos amparados por la inercia de sus marcas, en lugar de dar andan pidiendo que les paguen los salarios……otros alardean tanto con sus torres y mega obras que que sólo enseñan sus almas caritativas a cambio de contratos y los más conocidos, son esos empresarios de relumbrón que posan para la foto, pero que son expertos en pellizcarle recursos a una que otra fundación que presiden, antes de donar todo lo que recaudan.

Valientes almas caritativas para las desgracias nacionales.

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