El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL) un organismo público descentralizado de la Administración Pública Federal, ha dado a conocer su estudio anual el cual mide la pobreza en los municipios y estados de la República Mexicana. Hoy los resultados no son alentadores y dan cuenta de que los programas sociales en el país deben de reforzarse y en su caso modificarse.

De acuerdo al estudio presentado, en los últimos dos años 500,000 mexicanos se sumaron a la pobreza, para quedar en un total de 53.3 millones en 2012, La pobreza pasó de 52.8 millones en 2010, que representaba el 46.1% a un 45.5% en 2012. Esta disminución porcentual se debe a la variación poblacional en ese periodo de tiempo, ya que el número de mexicanos pasó de 114.5 a 117.3, según el Consejo Nacional de Población, por ello debemos tener muy presente que en términos porcentuales pareciera que la pobreza disminuye; sin embargo, no lo hace el número de mexicanos en ésta situación.

Se obtuvieron resultados positivos en el combate a la pobreza extrema, en aquellos grupos vulnerables que acceden a programas como oportunidades, piso digno, seguro popular los cuales contrarrestan la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran; sin embargo, no se hace nada por los nuevos pobres que están todos los días acercándose a ese umbral.

En cinco estados se concentra más del 60% de pobreza extrema, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Puebla y Veracrúz, entidades del centro sur del país que pareciera que sus sierras tienen en común la pobreza.

El escenario en Puebla no dista mucho, ya que también aumentó; sin embargo, por ese afán que tienen los gobernantes de justificar su pobre trabajo ante el tema, se dio la desafortunada declaración de Lalo Rivera quien dijo que en Puebla aumentaron los pobres porque aumentó la población. Entonces ¿mientras más poblanos nazcan más pobres serán o cómo? De ese nivel el Presidente de las Asociaciones de Municipios, mientras tanto los más perjudicados son los pobres  poblanos con esas autoridades.

En las regiones con mayor marginación luchan día a día por el sustento, el gobierno federal sólo ha contenido el problema como lo aceptó Luis Videgaray; sin embargo, ellos se encuentran enfocados en la aprobación de dos reformas estructurales que traigan consigo un crecimiento económico y con ello la reducción de estos índices.

Una reforma hacendaria que aún está en proyecto así como la transformación de Pemex para volverla más competitiva y con ello lograr mayor rentabilidad para el Estado mexicano son sus propuestas; otorgándoles el beneficio de la duda y si éstas reformas pudieran tener el impacto económico que esperan y con ello un crecimiento económico, aún tendrían que detallar qué estrategias instrumentarán para ofrecerle a esos más de 50 millones de pobres en el país programas o acciones de gobierno que conlleven a un desarrollo económico y con ello seguridad social.

La falta de políticas de desarrollo regional y el aumento de pobreza pone en situación de rezago a los ciudadanos que no ven en el trabajo honesto una forma de mantener a su familia y así pasan a engrosar las filas de crimen y nos llevan a situaciones como las que se viven en Michoacán en donde el Estado ha perdido una de sus principales funciones que es la de salvaguardar la integridad de su población.

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