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Conoce cuál es el Pueblo Mágico de Puebla ideal para la fotografía

  • Lizzette Vela
Neblina, cascadas y tradición se fusionan en este destino ideal para capturar imágenes únicas y llenas de vida
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Uno de los Pueblos Mágicos que se encuentra ubicado en la Sierra Norte de Puebla, se posiciona como el destino favorito para los amantes de la fotografía. Con su clima húmedo, calles empedradas y paisajes cubiertos de neblina, Cuetzalan ofrece escenarios que combinan naturaleza, arquitectura colonial y tradiciones indígenas.

Su riqueza visual atrae tanto a fotógrafos profesionales como a aficionados que buscan capturar momentos únicos.

Uno de los puntos más fotografiados es la Cascada de Las Brisas, rodeada de vegetación y accesible tras una caminata por senderos naturales. A pocos kilómetros, la Cascada de El Salto, con sus 60 metros de altura, ofrece un espectáculo visual que invita a experimentar con encuadres y perspectivas. Ambos lugares son ideales para retratar la fuerza y belleza de la naturaleza.


En el centro histórico, la Parroquia de San Francisco, construida en el siglo XVI, destaca por su arquitectura neogótica y su torreón imponente. Los domingos, el tianguis tradicional se convierte en un lienzo de colores y texturas, con artesanías, huipiles y productos locales que reflejan la vida cotidiana de la región. Este mercado es un espacio perfecto para capturar la esencia cultural de Cuetzalan.

 

Para quienes buscan panorámicas, el mirador de la Iglesia de los Jarritos ofrece vistas espectaculares del pueblo y sus alrededores. Durante el amanecer o atardecer, la neblina y la luz natural crean efectos visuales que transforman el paisaje en una obra de arte. Además, las Grutas de Atepolihui, con sus formaciones rocosas y juegos de luz, son un escenario ideal para fotografías con enfoques creativos.

 

Las festividades locales de Cuetzalan también enriquecen el repertorio fotográfico. La Feria del Huipil y el Café, celebrada en octubre, muestra danzas tradicionales, rituales indígenas y trajes típicos que llenan de color y movimiento las imágenes. Este evento es una ventana a las raíces culturales de la región.

Para los fotógrafos, este Pueblo Mágico es un lienzo en constante transformación, donde cada rincón ofrece una nueva oportunidad para capturar la esencia de Puebla.

 

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