La cultura zapoteca revive en cada hilo de los diseños de Natalia Toledo, poeta y artista visual, quien presenta su exposición Ladidoo/Piel de hilo en el Centro Cultural San Pablo, Oaxaca. Con 70 piezas, entre textiles y joyería, esta muestra resalta la conexión entre la tradición y la creatividad contemporánea.

La obra de Toledo, reconocida también como autora de Olivo negro y Premio Nacional de Literatura Nezahualcóyotl 2004, transforma elementos cotidianos de su natal Juchitán en piezas únicas. Totopos, camarones, lagartos y nenúfares se convierten en joyas y bordados que evocan la vida istmeña. Desde su infancia, Toledo comenzó a intervenir huipiles, llevando consigo los sabores y paisajes de su tierra.

La inspiración detrás de Ladidoo, que significa "piel de hilo", proviene de códices antiguos como el Códice de la Cruz Badiano y la Dendrología natural y botanología americana, ambos reflejos de la riqueza botánica y cultural de México. En sus creaciones, Toledo rinde homenaje tanto a estas tradiciones como a su historia personal, hilvanando recuerdos de su madre y la influencia artística de su padre, el pintor Francisco Toledo.

"Las moscas, los totopos y los pescados forman parte de mi vida", comparte Toledo, quien incluso ha defendido el valor simbólico de estos elementos en su obra. En Juchitán, las moscas se replican en oro como primeras joyas para niñas, un detalle que Toledo incluye en sus diseños, retando percepciones externas.

La exposición también representa un punto culminante en la carrera de Toledo como diseñadora. Desde prendas intervenidas para amigas hasta colaboraciones en residencias artísticas internacionales, su trayectoria revela un profundo compromiso con la innovación y el respeto por la tradición.

Ladidoo/Piel de hilo estará abierta al público a partir de este viernes, a las 18:00 horas, en Oaxaca. Con esta muestra, Natalia Toledo busca celebra su herencia cultural y explorar la conexión entre el arte, la naturaleza y la identidad zapoteca. (LV)