• Cultura

La historia detrás de los 155 años de ferrocarriles en Puebla

  • Valeria De la Luz
Cada 7 de noviembre se conmemora el Día del Ferrocarrilero, en honor al Héroe de Nacozari
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En Puebla, la historia de los ferrocarriles data del año 1869, con la inauguración de la estación Ferrocarril Mexicano por parte del presidente de ese entonces, Benito Pablo Juárez García. Esta estación prestó su servicio hasta el año de 1974, siendo 105 años de constante actividad.

Durante el siglo XIX, las estaciones de los ferrocarriles Mexicano, Interoceánico y Mexicano del Sur se encontraban en el extremo noreste de la capital. En el año 1915, estas estaban dentro del área limitada que actualmente comprende las calles 2 y 18 Poniente, la avenida 11 Norte y la calle 17 Norte. Debido al crecimiento demográfico y la urbanización acelerada de los alrededores de la ciudad, estas enormes estaciones terminaron instaladas en la zona centro de Puebla.

Después de la Guerra de Independencia, la comunicación por ferrocarril entre la capital del país y Veracruz fue considerada la más importante y necesaria para los intereses comerciales. El 22 de agosto de 1837, se concedió el privilegio exclusivo a don Francisco de Arrillaga para la construcción del ferrocarril de México-Veracruz, con un ramal en el estado de Puebla. Así, la línea troncal México-Veracruz del Ferrocarril Mexicano, de cerca de 424 kilómetros, concluyó su construcción en el año de 1873. Ese mismo año se diseñó el ramal Apizaco-Puebla, de 47 kilómetros de longitud, cuya obra concluyó el 7 de septiembre de 1869.

El 16 de septiembre de 1869, el presidente Benito Juárez inauguró la estación en Puebla y el servicio directo entre los centros urbanos de México y Veracruz. La estación Puebla del Ferrocarril Mexicano quedó ubicada en la calle del Señor de los Trabajos, hoy avenida 11 Norte.

La antigua zona ferrocarrilera de la ciudad de Puebla no estaba formada únicamente por las tres grandes estaciones antes mencionadas. En 1871 se estableció en la capital un sistema de tranvías llamado Ferrocarril Urbano, y en 1890 se estrenó otro similar, el Ferrocarril Industrial. Ambos contaban con estaciones hacia el lado sur de la antigua estación del Ferrocarril Mexicano y de la plazoleta del Señor de los Trabajos, mientras que la antigua estación del Ferrocarril Nacional de San Martín Texmelucan en la actualidad se reutiliza para diferentes proyectos arquitectónicos.

La llegada de las máquinas de vapor provocó que terrenos agrícolas ubicados en las orillas de la ciudad se transformaran en la puerta de entrada a la misma. Los terrenos se fraccionaron y pasaron a ser utilizados como naves industriales, almacenes, bodegas, casas habitación para los trabajadores de la zona, fondas, pulquerías y cantinas. La zona se urbanizó y una gran cantidad de gente se movía frecuentemente por la zona ferrocarrilera.

La importancia que tuvo la creación de estaciones férreas es incuestionable en Puebla y México. En el país se establecieron alrededor de 2 mil 700 estaciones, muchas de ellas eran simples lugares señalados para la rápida y eventual realización de ascenso y descenso de carga y pasajeros.

7 de noviembre, Día del Ferrocarrilero, honrando la memoria de Jesús García, el Héroe de Nacozari

El 7 de noviembre es recordado como el Día del Ferrocarrilero, el cual fue decretado oficialmente por el presidente Manuel Ávila Camacho en el año de 1944, como homenaje a los trabajadores ferroviarios y en honor al 'Héroe de Nacozari'.

Este día también es conocido por la sociedad como el Día del 'Héroe de Nacozari', en honor al maquinista Jesús García Corona, de 26 años, quien salvó al pueblo dando su vida el 7 de noviembre de 1907. Según el relato, el joven se percató de que el fuego que salía del fogón de la máquina 501 estaba alcanzando el cargamento de dinamita que transportaba a la mina de Pilares, Nacozari. Por ello, Jesús decidió alejar el tren del pueblo para evitar una desgracia.

Se dice que, después de ver pasar el tren, los pobladores escucharon una gran explosión, que afortunadamente no dañó la comunidad, pero lamentablemente privó de la vida al joven maquinista y a 12 personas que viajaban en el tren.

La locomotora 501 está exhibida en Nogales, Sonora, y Jesús García es internacionalmente reconocido como “Héroe de la Humanidad” por la revista American Royal Cross of Honor Washington. (LV) 

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