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Deficiencias impiden inauguración del nuevo rastro municipal en Tehuacán

  • Andrea Castillo
Los vecinos de la colonia Juquilita denunciaron la presencia de olores desagradables y el desbordamiento de agua con sangre
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El nuevo rastro municipal de Tehuacán, inaugurado simbólicamente en tres etapas, no contó con una ceremonia formal de apertura debido a las deficiencias detectadas en sus instalaciones. Ni el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, ni el alcalde Pedro Tepole Hernández, realizaron el protocolo inaugural, pese a que ambos niveles de gobierno participaron en la inversión.

El rastro comenzó a operar el 7 de agosto de 2024. Sin embargo, los tablajeros reportaron fallos en las instalaciones, limitando su uso al sacrificio de cerdos, mientras que las reses continuaron siendo llevadas al rastro de la colonia Benito Juárez.

El propio alcalde dio a conocer que las instalaciones del nuevo rastro municipal serían inauguradas por el gobernador; sin embargo, durante su visita realizada la semana pasada, ninguno de los dos mandos realizó el protocolo inaugural debido a las deficiencias detectadas.

La decisión de no inaugurar formalmente las instalaciones fue tomada luego de que se detectaron problemas en la planta de tratamiento de aguas residuales, que sufrió entaponamientos, afectando su correcto funcionamiento.

La construcción del rastro fue dividida en tres etapas. La primera, inaugurada por el exgobernador Miguel Barbosa Huerta, consistió en la edificación del inmueble con una inversión de 59 millones 078 mil 361 pesos.

La segunda etapa, bajo la administración municipal de Tehuacán, se centró en el equipamiento del rastro, aunque no se ha divulgado el monto exacto de esta inversión.

La tercera etapa, que incluyó la instalación de la planta tratadora de aguas residuales, tuvo un costo de 17 millones 298 mil 099 pesos, financiados a través del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Municipal (FAISMUN).

Los vecinos de la colonia Juquilita, cercana al rastro, denunciaron la presencia de olores desagradables y el desbordamiento de agua con sangre hacia sus viviendas, pero a pesar de haber alertado a las autoridades del problema, no recibieron respuesta.

Además, trabajadores del rastro reportaron la acumulación de desechos debido a la falta de recolección o de un lugar adecuado para disponer de los restos de animales. (APP)

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