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​En julio de 2022, el entonces gobernador Miguel Barbosa Huerta ordenó operativos en la 46 Poniente, conocida por la venta de autopartes tanto legales como robadas, a fin de erradicar dichas actividades y expropiarla; aunque esto orilló al cierre de cerca de 150 negocios muchos otros permanecen y sus propietarios afirman contar documentos que avalan la legalidad de su mercancía. Además, del primer semestre de 2022 al primero de 2024 las denuncias por robo de autopartes en Puebla presentaron un alza del 229 por ciento.

Tras la serie de operativos desplegados por las autoridades hace dos años existe una disminución en el número de locales dedicados a la venta de autopartes, que pasó de ser un estimado de 350 a cerca de la mitad, según se pudo constatar en un recorrido efectuado por e-consulta.

Los operativos en la zona de la 46 y la 44 Poniente iniciaron el 5 de julio, cuando más de 100 elementos de la policía Municipal, Estatal y agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) arribaron para catear locales dedicados a la venta de autopartes.

Cerraron 150 negocios tras cateos del barbosismo en la 46

Mediante un recorrido, e-consulta pudo constatar que aunque la 46 Poniente ha retomado sus actividades, de los más de 300 locales que llegó a albergar cerca de 150 no pudieron recuperarse de los cateos.

En entrevista, un comerciante, quien prefirió omitir sus datos por temor a represalias, aseguró que de los 150 negocios que cerraron sus puertas 73 de ellos fueron cateados por las autoridades hace dos años.

Pese a esto, lamentó que al momento no exista un reporte oficial de la FGE con respecto a lo incautado. A su consideración, lo rescatable de estos operativos es que la mayoría de los criminales que les exigían cobro de piso ya no pasan por sus comercios.

Lamentó que la población continúe llamándolos “rateros” o “delincuentes”, pues existen casos como el suyo, que ofertan mercancía legal e incluso mostró su documentación en regla y los permisos otorgados para vender refacciones.

Sin embargo, reconoció que hay quienes venden autopartes robadas y unos más que consiguen su mercancía de los vehículos chatarra que ofrece el Ayuntamiento de Puebla o de los autos decomisados o en mal estado que llega a ofertar la FGE.

Un segundo comerciante entrevistado destacó que antes de los operativos era común que en los fines de semana las calles estuvieran llenas de autos estacionados, situación que ahora no ocurre.

Agregó que ahora casi no tienen visitas y las que hay no suelen ser de poblanos, sino de personas de otros estados, esto ante el temor de asistir a la zona.

Reveló que existe otra parte afectada, la de los empleos, desde los directos con respecto a los negocios que cerraron, hasta los indirectos, poniendo énfasis en restaurantes o cocinas económicas, de los cuales apenas sobreviven tres.

Este comerciante recordó que él fue uno de los locatarios que sufrió un cateo en su negocio; los ministeriales forzaron las puertas de su local y se metieron hasta su casa, llevándose dinero, ropa y hasta los tenis de unos de sus hijos, además de mercancía, pese a que demostró que se trataba de refacciones legales.

Robo de autopartes aumenta más del 200 por ciento en dos años

Aunque los cateos e intento de expropiación de autoridades con respecto a la zona de la 46 Poniente tuvieron como finalidad el combate al robo de autopartes, datos de la FGE señalan que este ilícito ha presentado un alza del 229 por ciento en apenas dos años.

Durante el primer semestre de 2022, antes del inicio de los cateos, en la ciudad se contabilizaban 275 denuncias por el delito de robo de autopartes.

Para el segundo semestre del mismo año, es decir, de julio a diciembre, hubo 325; fue durante este lapso que se efectuaron los cateos y se decomisaron más de 220 toneladas de “mercancía ilegal”.

En el primer semestre de 2023 se contabilizaron 432 carpetas de investigación. Sin embargo, para el segundo semestre la cifra repuntó a 639 denuncias.

Al primer semestre de este 2024 el robo de autopartes en la ciudad de Puebla registra 631 denuncias.

Los operativos contra la zona de la 46

Todo inició el 5 de julio de 2022. Autoridades despegaron un mega operativo en la zona de la 46 y la 44 Poniente e inmediaciones de la 11 Norte, con más de un centenar de agentes municipales, estatales y de la FGE.

Aquello fue sólo el principio de más de cuatro operativos, lo que terminó con que autoridades cerraran el paso de todo el perímetro de la 46 Poniente, evitando incluso el ingreso de vehículos.

El 15 de agosto los comerciantes efectuaron una protesta denunciando que los agentes de la fiscalía ingresaban a los locales y viviendas de los comerciantes por la madrugada sin órdenes de cateo y para sembrarles droga.

A raíz de ello se originó un efecto “cucaracha”, desatándose el robo de autopartes en otros puntos de la capital poblana, en particular el sur.

Algunos de los vendedores, con más de 20 años en labores, optaron por permanecer en la zona, incluso montando guardias en la calle ante el temor de que agentes irrumpieran en sus locales para sembrarles droga. (MCJ)

*Con información de Fernanda Escobedo