El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) contempla que la temporada de lluvias en Puebla se registrará en los meses de junio a septiembre de 2024; sin embargo, en la entidad se registraron lluvias torrenciales atípicas desde mayo.

Estas precipitaciones estuvieron acompañadas de actividad eléctrica, viento y granizo, lo que ocasionó que la ciudad de Puebla quedara bajo el agua o bajo el hielo a finales de mayo; en respuesta, la población reaccionó en contra de los responsables del desazolve y desagües de la ciudad, sin considerar que lo que se registró fue un fenómeno no predecible.

La llegada de ese tipo de tormentas no estaba considerada, ni siquiera meteorológicamente, debido a que se trata de fenómenos que se forman por la interacción entre el viento, la lluvia y otros factores relacionados con el sitio donde ocurre en específico.

Las autoridades de Protección Civil Estatal (PC) explicaron que en Puebla el pasado 24 de mayo de 2024 se registró un fenómeno conocido como downburst, traducido al español como “estallido”; como su nombre lo indica, se trata de una intensa tormenta que estalla al tocar la tierra causando efectos similares a los de un huracán.

¿Cuáles fueron las calles y las colonias más afectadas por las lluvias en Puebla?

Los lugares que sufrieron más afectaciones por la lluvia del 24 de mayo de 2024 fueron:

• Avenida 26 Poniente (frente a Plaza San Pedro)
• Colonia Francisco I. Madero, principalmente avenida 15 de Mayo
• Bulevar Hermanos Serdán
• Colonia La Noria
• 25 Sur
• 21 Poniente
• 23 Poniente
• 23 Sur
• 31 Oriente
• Diagonal Defensores de la República
• Bulevar Norte

Mientras que el 26 de mayo de 2024 otra gran tormenta afectó ahora con mayor fuerza al Centro Histórico de Puebla y otros puntos como el mercado Morelos, y el norponiente de la ciudad, en estos puntos hubo caída de árboles, ráfagas de viento e inundaciones.

Espacios como San Francisco, Plaza Herencia y otros espacios comerciales que se ubican en áreas bajas del Centro Histórico, registraron pérdidas económicas importantes.

Agua de Puebla Para Todos: ¿El responsable de las inundaciones por la lluvia?

Sin embargo, luego de considerar todos los desastres registrados por las lluvias, en diversas publicaciones en redes sociales y en medios de comunicación las personas cuestionaron el actuar de los responsables del desazolve y mantenimiento de los puntos de desagüe.

De forma directa se le señaló a Agua de Puebla para Todos por los desastres ocasionan, pero no se consideró que al tratarse de lluvias atípicas el viento arrastra más basura y otros elementos que ocasionan la obstrucción de las alcantarillas, por esta razón se consultó el reporte de Protección Civil que indicó lo siguiente:

Ante las intensas precipitaciones que se presentaron la tarde del 24 de mayo, el Ayuntamiento de Puebla implementó el Operativo Acuario, para atender los efectos de las lluvias con ráfagas de viento de hasta 30 kilómetros por hora y 6.5 milímetros de precipitación pluvial.

Se atendieron 74 reportes, principalmente por anegaciones en distintos puntos de la ciudad, así como por apagones, árboles caídos, averías en postes y semáforos.

Personal de Protección Civil y Servicios Públicos se desplegaron a las zonas de mayor afectación, tales como Amalucan, Bosques de San Sebastián, Centro Histórico, Parque Industrial Puebla 2000, Obrera Campesina, Las Hadas Mundial 86, San Pedro, 10 de Mayo, Azcárate, Avenida Juárez, así como en los bulevares Hermanos Serdán y Norte, entre otros puntos.

Por parte del monitoreo permanente, los niveles de ríos, barrancas y vasos reguladores no representan riesgo para la población.

En tanto, Policía y Tránsito Municipal se sumaron a las labores para salvaguardar la integridad de los ciudadanos, apoyando a conductores y realizando cierres viales para evitar accidentes. A la par se descartó que la acumulación del agua correspondiera con la falta de mantenimiento, sino con los desastres naturales en sí.

Esto debido a que la ciudad no cuenta con un tipo de suelo adecuado, que permita la rápida absorción del líquido, ocasionando que, en tormentas atípicas, no se puede regular fácilmente la cantidad de agua que se acumula en las calles de la ciudad y se generan grandes inundaciones como las del 26 de mayo.

Por lo que, en todo caso, la responsabilidad de Agua de Puebla es vigilar que en los días siguientes la red de alcantarillado quede en perfectas condiciones en caso de que regresen las lluvias, pero no podrán evitar que se inunde con el derrumbe de los árboles y otros desechos que resultan después de la tormenta.

Otro factor determinante ha sido el cambio climático, que ha exacerbado la frecuencia e intensidad de fenómenos meteorológicos extremos en todo el mundo. Según expertos del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), el aumento de la temperatura global ha incrementado la capacidad de la atmósfera para retener humedad, lo que resulta en precipitaciones más intensas cuando ocurren tormentas.

En el caso de Puebla, las condiciones climáticas se han vuelto cada vez más erráticas, con lluvias que superan los promedios históricos en cortos períodos de tiempo.

¿Qué trabajos realizó Agua de Puebla para contrarrestar los daños de las lluvias?

Antes y después de las lluvias, Agua de Puebla para Todos aplicó el mantenimiento en más de 3 mil kilómetros de la red de drenaje.

Con las lluvias de finales de mayo atendió 23 sitios de fuerte encharcamiento en dos días de intensa lluvia, sumado a la gran cantidad de granizo y el arrastre de basura a las alcantarillas, lo que provocó taponamientos en el drenaje.

Por lo anterior, Agua de Puebla invita a la población a no arrojar basura a las calles, toda vez que esa la causa principal de inundaciones por lluvia en 85 por ciento de los casos.

Desde el mes de noviembre de 2023, cuando concluyeron las pasadas lluvias, inició oportunamente la limpieza de la red sanitaria, logrando al 30 de mayo de 2024 el desazolve de mil 100 kilómetros del sistema de drenaje mixto, tanto residual como pluvial, así como 13 mil 600 accesorios de drenaje como pozos de visita, rejillas, coladeras y bocas de tormenta.

Durante el mantenimiento se succionaron y retiraron 13,500 metros cúbicos de azolve que incluyen basura y lodo que obstruyen los conductos de agua; además, fueron rehabilitados 218 accesorios faltantes o dañados.

Asimismo, se dio mantenimiento a las principales vialidades de alta afluencia vehicular, 12 distribuidores viales, pasos a desnivel y 31 puntos críticos de encharcamiento, con un equipo de 12 cuadrillas, 14 unidades hidroneumáticas, 2 cuadrillas de soldadores y 1 de video inspección.

Con esto, al iniciar la temporada de lluvias, el sistema de alcantarillado se encuentra en óptimas condiciones para evitar anegaciones en los puntos más vulnerables, pero recuerda que esto no puede evitar las consecuencias de un desastre natural. (MIG)