El obispo de Cuernavaca y secretario de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Ramón Castro Castro, señalo que el obispo emérito de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Guerrero, Salvador Rangel Mendoza, quien presuntamente fue secuestrado hace unos días, decidió no presentar acciones legales por temor a que atenten en su contra.

En entrevista con le periodista Ciro Gómez, Castro sentenció que hubo campaña sucia contra Salvador Rangel desde el gobierno de Morelos, ya que el clérigo emitió críticas severas en contra la administración al respecto de la inseguridad que se vive en el país y la entidad.

“Hay una frase en donde monseñor deja mucho que ver, en donde dice que ‘en consecuencia integra y moral’, ¿qué quiere decir eso? Que está amenazado, que no quiere volver a pasar una situación similar”, mencionó Castro.

El Monseñor mencionó que su homologo, Salvador Rangel, es reconocido por el papel que tomó como mediador entre grupos criminales, como “Los Tlacos” y “Los Ardillos”, en Guerrero.

“Era considerado una persona de gran talente, capaz de encontrarse con los capos, se logró una tregua y una semana después es considerado una persona que ha traicionado su vida, 54 años de vida religiosa, 7 años de obispo de Chilpancingo, 50 años de sacerdote y todo eso se va a la borda, yo creo que hay que poner en equilibrio lo que ha sido antes, era intachable”, sentenció el secretario del CEM.

Salvador Rangel Mendoza señaló a través de un comunicado que no presentará ninguna denuncia contra las personas que “tanto mal le han hecho”.

Tras su desaparición y posterior localización, solicitó a los medios de comunicación que “comprendan y respeten” su decisión, encaminada al bien de su seguridad e integridad física y moral.

“Perdono a todas las personas que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima, así como a aquellos que me han revictimizado producto de la desinformación”, indicó el clérigo a través de un comunicado. (JRLM)