- Seguridad
Directora de la cárcel de San Miguel tenía diversos frentes abiertos
La directora del penal de San Miguel, María del Rayo Mendoza Farfán, tenía varios frentes abiertos los cuales pudieron haber provocado el atentado que sufrió la noche del miércoles 6 de marzo, esto por las inconformidades señaladas desde que se encuentra al frente de este reclusorio.
El lunes la directora del Cereso de San Miguel fue amenazada con una lona de advertencia, la cual fue colgada en uno de los puentes peatonales del Periférico Ecológico, donde se hizo alusión a que Del Rayo Farfán se había metido “con la persona equivocada”.
Además, familiares de reos que se encuentran bajo un proceso penal en San Miguel, en repetidas ocasiones han mostrado su inconformidad en grupos de redes sociales respecto a la manera en que Del Rayo Farfán lleva la dirección, pues la han acusado de corrupción, omisión, y traslados injustificados.
También han referido que han cambiado las concesiones de comercios al interior del centro penitenciario más grande de Puebla.
Las publicaciones en Facebook refieren que desde que Farfán ingresó como directora, la situación ha cambiado al menos en las visitas, se han prohibido ciertos alimentos básicos para ingresar al penal y de igual forma la denunciaron de no tomar acciones legales contra los custodios que, presuntamente protegen y encubren a reos peligrosos para que puedan seguir operando en el mundo de la droga.
Además de que en el penal de San Miguel siguen los privilegios para unos cuantos, lo que ha provocado en el lugar diversos enfrentamientos. En cuanto a la corrupción, se ha expuesto que a los reos se les sigue cobrando cuotas prácticamente para todo, desde tener que pagar para un pedazo de papel higiénico y el pase de lista por las noches, entre otras cosas más.
El atentado contra la directora
La noche del miércoles la directora del reclusorio de la ciudad de Puebla, fue atacada por dos sujetos a bordo de una motocicleta cuando ella viajaba a bordo de su camioneta blindada sobre el Periférico Ecológico.
Al ser un vehículo blindado los disparos no trascendieron y los sicarios en motocicleta huyeron de inmediato.
El ataque ocurrió justo un día después de que fueron demolidos los locales que por años estuvieron colocados frente a la cárcel de San Miguel, los cuales estaban clausurados desde hace poco más de un año, debido a que las autoridades estatales señalaron que en estos puntos se comercializaban objetos de dudosa procedencia, así como sustancias ilícitas. (CR).