La pérdida de parte del fuselaje en pleno vuelo de un Boeing 737 Max-9 de Alaska Airlines provocó la inspección de todos los aviones del mismo modelo, Aeroméxico tuvo que cancelar 131 vuelos entre el 6 y el 9 de enero.

De acuerdo con un comunicado, la cancelación de los vuelos se debió a una inspección que se realizó en todas sus unidades de dicho modelo, lo que afectó a 19 mil 135 pasajeros que viajarían con la aerolínea durante esos días.

Sin embargo, según informó la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Aeroméxico aseguró que, de acuerdo con sus políticas, “la aerolínea refiere haber sido debidamente reacomodados y apegados a la política de flexibilidad vigente”.

Asimismo, la aerolínea publicó las medidas de protección que aplican a los pasajeros que viajarían en las rutas operadas con equipos Max-9m que se pueden identificar ya que en el boleto expedido se etiqueta con placa 139 y el código AM.

El paro de actividades en todos los aviones del modelo Boeing 737 Max 9 fue ordenado por la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) para poder ser revisados.

La inspección de los aviones también afectó a aerolíneas como United Airlines, quien junto con Alaska Airlines presentaron las mayores afectaciones, al encontrar tornillos sueltos en algunos de los aviones de su flotilla.

Además de las ya mencionadas, también se vieron afectadas otras aerolíneas, como modelo de Boeing son Copa Airlines, Iceland Air, Turkish Airlines y FlyDubai.

El pasado 5 de enero, un vuelo con la ruta Portland, Oregon a Ontario, California tuvo que regresar al aeropuerto del que despegó minutos antes luego de que una parte del avión se despegara a 5 mil metros de altura; destaca que el avión tenía apenas una semana de antigüedad.

Aunque no hubo víctimas tras el accidente, ya que ninguno de los 177 pasajeros que se encontraban en el avión estaban sentados junto a la sección del fuselaje que se despegó, la empresa Boeing llamó a una reunión de seguridad para poder dar una respuesta sobre el accidente.

No es la primera vez que la empresa armadora se ve envuelta en incidentes de este tipo, pues el modelo anterior, el Boeing 737 Max-8, tuvo que ser inmovilizado dos años alrededor del mundo luego de que se presentaran fallas en dos de las unidades, lo que causó accidentes en los que murieron 346 personas en Indonesia y Etiopía, en 2019 y 2020, respectivamente. (JC)