El 4 de octubre es un día importante dentro de la religión católica, pues se celebra a San Francisco de Asís. Además de flores, música, comida y otros divertimentos, en Puebla se acostumbra a realizar el Topetón, palabra que proviene de la popular frase: “Sabes a quién me topé”.

En Puebla, el Topetón se realiza desde el 2016, no obstante, a causa de la pandemia por covid-19, se suspendió por dos años (durante el 2020 y 2021), regresando hasta este año, el pasado 6 de agosto; es por ello, que muy pocos feligreses poblanos conocen esta actividad.

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El principal trasfondo de esta costumbre religiosa es recordar la fraternidad que existía entre San Francisco de Asís y Santo Domingo de Guzmán, quienes, al encontrarse en el siglo XII en la Archibasílica de San Juan de Letrán, catedral de la diócesis de Roma, se dieron un abrazo fraternal:

“Es una tradición antigua que comenzó desde el siglo XVI. Es un encuentro fraterno entre las dos órdenes religiosas: franciscanos y dominicos, en virtud de una tradición, de una leyenda en la que se cuenta que Santo Domingo y San Francisco se encontraron en Roma y, al encontrarse, se fundieron en un abrazo”, narró Fray José Luis Martínez, prior del Convento Santo Domingo para N+.

El encuentro de estos dos religiosos en la Roma medieval (del siglo XII) se dio porque ambos andaban en busca de la autorización de sus órdenes en la Iglesia Católica.

Pese a que el Topetón comenzó a realizarse en la ciudad de Puebla desde el 2016, tras su suspensión por dos años a causa del covid-19, muchos poblanos católicos no conocían esta tradición religiosa que comenzó como tal en el siglo XVI.