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Últimos días de julio se llenan de lluvias de estrellas
El mes de julio está a punto de terminar y se despedirá con tres lluvias de meteoros, llamadas popularmente como lluvias de estrellas, y una luna nueva, por lo que te decimos qué fechas debes apartar en tu calendario para no perderte estos eventos astronómicos.
El primer fenómeno que sucederá es la luna nueva, de ahí le sigue la lluvia de meteoros Piscis Austrínidas, la Delta Acuáridas del Sur y la Alfa Capricórnidas.
28 de julio. Luna Nueva. De acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología, Óptica y Electrónica (Inaoe), a partir de las 17:54 horas, el satélite terrestre comenzará a mostrar una faceta conocida como luna nueva.
29 de julio. Lluvia de meteoros Piscis Austrínidas. El origen de esta lluvia de estrellas aún es desconocido, sin embargo, su actividad tiene una duración aproximada de casi un mes, del 15 de julio al 10 de agosto, siendo el 29 de julio el día con mayor actividad.
El Inaoe ha señalado que se observarán alrededor de cinco meteoros por hora, los cuales se verán con mayor nitidez durante el amanecer del viernes 29 de julio. Para observarlas, se recomienda mirar hacia la parte sureste de la Esfera Celeste.
30 de julio. Sin duda el sábado 30 de julio es el más especial, debido a que acontecerán dos lluvias de meteoros: la Delta Acuáridas del Sur y la Alfa Capricórnidas. A continuación, los detalles de cada una de éstas.
Lluvia de meteoros Delta Acuáridas del Sur. Su actividad comenzó el 12 de julio y se espera que termine hasta el próximo 23 de agosto. Las instituciones expertas en Astronomía señalan que el cometa 96P/Machholz es el causante de esta lluvia.
La tasa máxima de meteoros que se podrá observar para las Delta Acuáridas del Sur es de 25 por horas, la cual se alcanzará durante el amanecer del 30 de julio; para verlas se recomienda mirar hacia la parte sureste de la Esfera Celeste.
Lluvia de meteoros Alfa Capricórnidas. Este fenómeno tiene lugar entre el 3 de julio al 15 de agosto, siendo también el 30 de julio su día de mayor actividad. Su origen se debe al cometa 169 / NEAT.
La tasa máxima observable será de 5 meteoros por hora, por lo que se trata de un fenómeno con poca actividad. Al igual que las demás lluvias de meteoros ya mencionadas, ésta ocurrirá la madrugada del sábado 30 de julio, en la parte sureste de la Esfera Celeste.