La venta de autos usados aumentó en Puebla ante la crisis de semiconductores que vive la industria automotriz, debido a la poca disponibilidad en el mercado para adquirir un auto nuevo, señaló el presidente de Canacintra Puebla, Luis Espinosa Rueda.

En rueda de prensa este lunes el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) indicó que el aumento de los precios de autos usados va del 20 al 30 por ciento.

“Si ahorita quieres comprar un coche nuevo, prácticamente es imposible que compres el que quieras, vas a comprar el que haya. Qué efecto ha tenido esto, que el mercado de autos usados ha subido impresionantemente el costo de las unidades en un 20, 30 por ciento al costo que normalmente estaría, y esto porque realmente mucha gente tiene la necesidad de comprar coches y, como no hay nuevos, prefieren comprar uno usado de su gusto y esto ha subido el mercado”, relató.

Señaló que la falta de insumos, desde chips semiconductores hasta pinturas, ha provocado que la producción sea limitada y que los clientes prefieran autos usados o los llamados autos “chocolate”, que son de origen extranjero.

Sobre estos últimos, Espinosa Rueda se manifestó en contra de su regulación, pues sentenció que legalizar lo ilegal es un golpe a la industria, pues las ventas no repuntan y también se fomenta el comercio informal de “fayuca” por parte del gobierno.

“El tema de los autos chocolate nos pega duro a la industria automotriz y eso sí es lamentable, porque es una decisión de legalizar lo ilegal, y eso no es una buena noticia de ninguna manera, y creo que ahí debería el gobierno estar instalando programas para ayudar al sector campesino, que es en donde más hay autos chocolate, para poderles proveer unidades. Fomenta el comercio ilegal, informal, el tráfico de mercancía fayuca y eso sí está pegando en las agencias”, advirtió.

Paros técnicos seguirán, pero no prevén despidos

Espinosa Rueda reconoció que los paros técnicos en la industria automotriz continuarán todo el año, tanto los programados, como los forzados, aunque dijo que las afectaciones al personal serían nulas, pues son mano de obra calificada y cara.

“Como les he comentado este es un tema que no va parar en todo el año, hay paros programados e indudablemente va a haber paros forzados por cuestiones de chips, o retrasos en la logística. A amblas plantas les ha pegado muy duro este tema porque la industria automotriz no ha podido recuperarse”, lamentó.

“En la industria no va a haber y no creo que haya este año una cuestión de despido de personal por los paros técnicos, ni en la proveeduría ni en la parte de las ensambladoras, porque es una mano de obra muy altamente capacitada, muy cara para capacitar y que definitivamente te saldría más caro despedir y recontratar otra gente y capacitarla”, afirmó.

No obstante, dijo que sí es probable que se den reducciones de salario por los paros, lo que merma la productividad de las ensambladoras y por tanto el costo de producción de las unidades.

“Las unidades que puedan producirse van a salir más caras porque traen un costo de poca productividad, es decir, haces una división entre menos coches por el mismo gasto, al final de cuentas el costo por unidad es más alto y aparte tienes un impacto en el costo por la inflación”, explicó.