- Economía
La inflación para los pobres está en 10 por ciento: IMCO
A pesar de que la inflación oficial nacional fue de 7.99 en junio, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) indicó que para las familias con menos ingresos, alcanzó un nivel de casi 10 por ciento.
De acuerdo con el IMCO, para las familias que perciban hasta 3 mil 313 pesos mensuales, la inflación de la canasta de consumo llegó a ser de 9.78 por ciento y conforme aumentó el ingreso de los hogares aumentó, menos se resintió la inflación.
Para el segundo decil de hogares con hasta 5 mil 621 pesos, la inflación habría sido de 9.60 por ciento. Para los que perciben hasta 7 mil 425 pesos mensuales, fue de 9.37 por ciento y en el cuarto decil, con 9 mil 186, la inflación fue de 9.21 por ciento.
Para familias con ingresos de hasta 13 mil 369, la inflación fue de 8.87 por ciento y bajó más para las familias con hasta 16 mil 223 pesos, ya que fue de 8.71 por ciento. En los deciles ocho y nueve, con 20 mil 199 y 26 mil 812 pesos, la inflación fue de 8.52 y 8.30 por ciento respectivamente.
Solo en el último decil, cuando el ingreso de las familias superó los 54 mil 427 pesos mensuales, la inflación fue de 7.92 por ciento, es decir, ligeramente por debajo del dato general del 7.99 por ciento reportado por el INEGI.
Este índice inflacionario es el más alto reportado desde hace 21 años, cuando en enero de 2001 se registró un nivel del 8.11 por ciento y desde hace ocho meses a la fecha se ha mantenido en un nivel superior al 7 por ciento, por encima del nivel objetivo del Banco de México.
¿Por qué los hogares pobres se ven más afectados?
El IMCO detalló que los hogares con menores ingresos distribuyen sus gastos de manera distinta a los hogares con mayores ingresos, pues destinan aproximadamente el 50 por ciento a los alimentos.
Los hogares en el último decil, sólo destinan el 28 por ciento a alimentos, bebidas y tabaco, lo que quiere decir que los hogares más pobres destinan casi el doble de lo que destinan los hogares más ricos en alimentación.
Por esta diferencia de distribución del gasto, los aceites y grasas representaron el 1 por ciento del gasto de los hogares pobres, el 0.5 por ciento para los de ingreso medio y un 0.2 por ciento para los de ingreso más alto.
Las frutas representaron 1.5 por ciento en los más pobres y sólo 1.4 por ciento en los más ricos. En el caso del huevo, para los hogares más pobres representó el 2.6 por ciento y para los de ingresos superiores, un 0.5 por ciento.
En productos derivados de trigo y maíz, las familias pobres habrían destinado 10.2 por ciento de sus ingresos y las familias con más ingresos, apenas 2.6 por ciento, de acuerdo con los datos del IMCO.