La literatura como forma de expresión ha servido como retrato de la sociedad en un momento y lugar específico, tal es el caso del cuento “Tía Nela” del escritor mexicano Enrique Serna, que narra la historia de Efrén, un joven originario de la ciudad de Puebla, que se enfrenta a los prejuicios de su tía por ser homosexual.

“Tía Nela” es un cuento que forma parte del libro “El orgasmógrafo” (2001) de Enrique Serna, que se centra en la historia de Efrén, un joven que, ante la muerte accidental de sus padres, es criado por su tía Nela, una mujer católica de clase media.

La historia de Efrén y la tía Nela se desarrolla en la capital poblana, alrededor de la década de los setenta, puesto que se menciona la visita del papa Juan Pablo II por las calles del Centro Histórico, suceso que tuvo lugar el 23 de enero de 1979.

La narración es una especie de monologo que la tía Nela hace de su vida al lado de sobrino Efrén, quien desde muy pequeño quedó a su cuidado y muestra afinidad por niños de su mismo sexo, así como por el maquillaje y la ropa de mujeres.

Ante ello, el discurso de la tía Nela es una serie de reproches a Efrén, quien al crecer decide cambiar su nombre por Fuensanta, convertirse en sexoservidora, someterse a una cirugía de reasignación de sexo y hasta intentar casarse con un hombre:

“Un buen día se te hizo fácil venir a casa vestido de mujer y en el colmo del cinismo quisiste que te llamara Fuensanta, como te dicen todos tus compañeros de oficio. Dios sabe cuánto me resistí a ser tu cómplice en esa abominable suplantación de sexos”, protesta Nela.

A lo largo de la narración, se evidencia la vergüenza que la tía siente por su sobrino por ir en contra de los estatutos de la sociedad poblana y de la religión católica que profesa, convirtiéndose en el blanco de críticas y rumores de su círculo cercano, hecho que nunca le perdona a Efrén.

Resulta curioso que el cuento fuera publicado en el 2001, que retrate una Puebla de hace más de 40 años, pero que siga teniendo vigencia, ya que, en su mayoría, los poblanos siguen teniendo ideas muy apegadas al catolicismo y, por consiguiente, prejuicios ante la homosexualidad.

“Para volver más pronto a casa corté camino por la calle 13 Sur, sin sospechar que se había vuelto una zona de tolerancia. De las cantinas salían hombres beodos que trastabillaban al andar y en cada esquina dos o tres mujeres del Paseo Bravo fumaban con impaciencia esperando clientes. Ni por ser un día de fiesta religiosa habían dejado de practicar su inmundo comercio”, son las palabras de las que Serna dota a Nela.

Sin duda, Enrique Serna, escritor que ha visitado en varias ocasiones la capital poblana, a través de “Tía Nela” logra retratar la personalidad que caracteriza a la ciudadanía del estado de Puebla. Si quieres leer el cuento completo, te dejamos el link Tía Nela, cuento de Enrique Serna – Circulo de Poesía (circulodepoesia.com) donde podrás encontrarlo.