- Seguridad
Le decían “Charrito” y tenía 25 años, el decapitado de Ayotoxco
Víctor Antonio Hernández, el hombre decapitado y cuya cabeza apareció junto a sus manos frente a una escuela primaria del municipio de Ayotoxco de Guerrero, no tenía 36 años de edad, sino 25 y era conocido como el “Charrito”.
Luego de la aparición de sus restos junto a una narcomanta donde se advertía “una limpia”, familiares y conocidos ―quienes no dan crédito a lo sucedido― pidieron no compartir las imágenes por respeto a su familia.
“Descansa en paz. Estoy en shock. Siempre estarán en mi corazón”, “QEPD chamaco. Los que te conocimos sabemos que nunca te metías con nadie en el barrio, solo Dios sabe por qué suceden las cosas. Pronta resignación a la familia”, “yo lo conocí, vivía en mi colonia. Que en paz descanse”, “¡caray!, mi más sentido pésame para toda la familia, mucha fuerza y resignación. En paz descanse el amigo Toño”, son algunos de los comentarios que se leen en la red social.
El “Charrito” radicaba en la localidad de la Lima, en el municipio de Tenampulco, y se presume que estaba vinculado a actividades ilícitas porque la narcomanta mencionó a ladrones de ganado y “chapulines”.
La mañana del martes pobladores reportaron el cuerpo de un masculino al interior de una vivienda y cuadras después se encontró la cabeza y manos, justo en la parte trasera de la escuela primaria Rafael Ávila Camacho.
En la reja de la institución educativa fue colgada la manta firmada por “El Mando” que señala: “ya estamos aquí en la zona instalados. Venimos por lacras y todos los chapulines (Martha, Isidro, Max, el Puerquito, Leobardo, Isaac Rojas, Guicho Gonzpalez, Alfonso Pérez, Gabriel Blanco) y todo aquel que ande robando ganado y también por todos aquellos que anden haciendo mamadas”.
Elementos de la Policía Municipal tuvieron que cubrir la cabeza y las manos con una cobija y el narcomensaje con una bolsa negra de basura mientras arribó personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) para realizar las diligencias correspondientes.