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Para FGE solo fue robo ataque a madre e hija en la Gonzalo Bautista
Admyse Nazareth, la joven que fue apuñalada junto a su madre por un sujeto que ingresó a su domicilio en la colonia Gonzalo Bautista, acusó indiferencia del agente del Ministerio Público que lleva su caso pues, aunque el agresor las amenazó de muerte, para la Fiscalía General del Estado (FGE) solo fueron víctimas de robo y no de homicidio en grado de tentativa.
La estudiante de Artes Plásticas utilizó sus redes sociales para narrar la pesadilla que vivieron ella, su mamá y su hermano de seis años la mañana del sábado pasado. También reveló que su atacante ya fue identificado: se trata de Rogelio O. alías “El Rojo”, un conocido de su papá.
El relato de la joven de 23 años refuta el reporte presentado por la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) del municipio de Puebla.
Detalló que su mamá, la señora Myriam O.V, de 46 años de edad y catedrática de un instituto, salió aproximadamente a las 7:45 horas para llevar a su esposo al trabajo.
Admyse y su hermano Amauri se quedaron durmiendo en casa. Cuando su mamá regresó fue atacada por “El Rojo”, quien ya la esperaba en la cochera y le exigió las llaves para poder ingresar a la sala.
“Le tapó la boca, le apuntó con una pistola y le dijo que la iba a matar, que no gritara. Quería que le diera las llaves para ingresar a la sala. Mi mamá se resistió; peleó con él y en el forcejeo el atacante tiró la pistola (...) la estaba asfixiando y logró meterla a la sala”.
Al escuchar ruido, la joven bajó de su cuarto y descubrió que su mamá era golpeada por un sujeto. De inmediato trató de defenderla, pero también fue agredida; Myriam logró soltarse y corrió hacía la cocina por un cuchillo.
“Mi mamá lo amenazó para que se fuera, pero él cerró la puerta y se le fue encima. Luego nos gritó que valimos madre y nos cargó la chingada y dijo que nos iba a matar”.
Rogelio le arrebató el cuchillo a la señora y, cuando Admyse trató de quitárselo, fue herida en el cuello y comenzó a sangrar. Después atacó a Myriam y hasta ese momento la mujer pudo verlo de frente y descubrió que era un conocido de su esposo.
“Le gritábamos a mi hermanito que se escondiera porque ya sentía que la vida se me iba. Le pedí a mi mamá que buscara ayuda pero no quería dejarme sola y seguía luchando para salvarnos la vida”.
Myriam tomó otro cuchillo y logró herir al atacante en la espalda; sin embargo, él también la lesionó en el rostro y manos.
La pesadilla terminó cuando la catedrática abrió el portón de su casa y gritó para pedir ayuda. Dos vecinos que pasaban en ese momento ingresaron al domicilio, sometieron al agresor y lo amarraron para que ya no siguiera golpeando a la estudiante.
Cuando elementos de la policía llegaron descubrieron que el arma era de juguete.
Las dos mujeres fueron sometidas a una cirugía. Admyse tiene parálisis facial y los golpes que recibió en diversas partes del cuerpo le provocaron incontinencia urinaria. Su mamá tiene la mitad del rostro paralizado y heridas de aproximadamente 14 centímetros de largo.
“Rogelio no conocía mi casa, el movimiento ni por dónde podía brincar o esconderse. Estamos seguras de que se metió en la madrugada, se escondió y esperó a mi mamá para atacarla. Tenemos mucho miedo, no podemos ni queremos vivir así, por esto estamos pidiendo ayuda”.
Las víctimas exigieron que la carpeta de investigación se integre bajo el delito de homicidio en grado de tentativa y no robo, como pretende el Ministerio Público.