Juan Alberto V., de 25 años de edad, fue asesinado de varios disparos realizados con armas AR-15 cuando se encontraba a las afueras de la casa de su madre, a quien se encontraba visitando en la colonia La Guadalupana de la ciudad de Puebla.

Así lo dieron a conocer diversos reportes policiales, los cuales indican que alrededor de las 23:00 horas del lunes 30 de septiembre se reportaron diversas detonaciones con arma de fuego en dicha colonia.

Elementos de la Policía Municipal atendieron el llamado de auxilio recibido al 911 y arribaron hasta la Privada Señora de Guadalupe, Lote 3 Manzana 7, casa 3-A, donde hallaron a un hombre tirado en el patio de una casa junto a una mujer, quien dijo ser María Concepción, de 47 años de edad.

La mujer explicó que el lesionado era su hijo de nombre Juan Alberto, el cual tenía 25 años de edad y se encontraba de visita, mismo que al ser valorado por los paramédicos de SUMA en la ambulancia 208 se determinó que ya no contaba con signos vitales.

El ahora occiso presentaba lesiones por arma de grueso calibre y de acuerdo con la inspección del lugar por parte de la Policía Municipal, en la zona fueron localizados al menos una decena de cartuchos calibre .223, correspondientes a los empleados por rifles tipo AR-15.

Una vecina que atestiguó los hechos narró a los uniformados que los responsables fueron sujetos que viajaban a bordo de una camioneta tipo Ford Lobo, color blanca, de doble cabina y con los cristales polarizados en negro.

Presuntamente con dicha unidad los sospechosos chocaron una camioneta Chevrolet Meriva propiedad de la testigo, para después sacar armas largas y abrir fuego contra Juan Alberto, dándose a la fuga finalmente con rumbo desconocido.

El lugar quedó acordonado por la Policía Municipal y por la Fiscalía General del Estado para realizar las diligencias de levantamiento de cadáver, mismas que concluyeron durante la madrugada de este martes.

Hasta el momento se desconoce el móvil de este ataque y se espera que con base en la recolección de más indicios se pueda precisar la identidad de los agresores.

Fotos: Alberto Montero