- Sociedad
Freno a feminicidios y castigo a los culpables exigen en marcha
Organizaciones civiles que participaron en la marcha silenciosa contra el feminicidio criticaron el silencio del gobernador del estado,Rafael Moreno Valle, ante el recrudecimiento de violencia hacia la mujer y la ola de feminicidios en Puebla, por lo que hicieron unllamado urgente a las autoridades para implementar medidas que prevengan y combatan este delito.
El contingente, conformado por aproximadamente 300 personas, salió desde el Paseo Bravo y caminó toda la avenida Reforma hasta el zócalo de la ciudad, donde realizó una protesta pacífica.
A la marcha asistieron las mamás y familiares de jóvenes desaparecidas y asesinadas, entre los que resaltaron los allegados dePaulina Camargo Limón, Samai Alejandra Márquez Salgado, Olga Nayeli Sosa Romero, Miriam Manzola Heras y Alejandra Téllez Pérez.
Una de las integrantes del Observatorio de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr) destacó que durante 2015 se registraron 55 feminicidios, mientras que en los dos primeros meses del presente año se han contabilizado 15 casos y, pese a ello, las autoridades estatales no han impulsado ninguna campaña pública contra la violencia hacia la mujer.
“No ha habido ni una sola semana en donde un caso de feminicidio salga en los medios de comunicación. Es indignante y es alarmante. Es indignante el silencio de las instituciones, del gobierno. Queremos que no haya más feminicidios. Exigimos al gobernador que hable y diga algo sobre el tema”, reclamó.
Hablan familiares de las víctimas
Entre los asistentes estaban los padres de Samai Márquez, la joven que en días pasados fue asesinada y hallada en Valsequillo; sin embargo, se reservaron a dar entrevistas y a hablar sobre las investigaciones del crimen.
Por su parte, Rocío Limón, madre de Paulina Camargo, pidió a los poblanos que se unan para exigir a la Fiscalía General del Estado (FGE) que entregue resultados de las investigaciones de las mujeres desaparecidas o asesinadas, pues consideró que no se puede estar esperando a que las autoridades hagan su trabajo si ellos no le dan seguimiento a los casos.
María Teresa Montes, madre de Fernanda Montes, exigió justicia para su hija de 14 años de edad, que fue asesinada por su novio, en noviembre de 2013, en la colonia Riego Sur.
Dijo que, aunque las autoridades ministeriales cuentan con el señalamiento directo contra el joven, éste no ha sido presentado ni mucho menos investigado.
En esa misma situación se encuentra el caso de Alejandra Téllez Pérez, de 33 años de edad, quien murió el 24 de diciembre de 2015, en el municipio de Tepeaca, al ser apuñalada a manos de un sujeto que está plenamente identificado y que hoy goza de su libertad.
Así lo narró entre sollozos la hermana de la occisa, quien mencionó que hasta el momento la averiguación previa del caso no ha sido consignada ante un juez.
Otro crimen que impactó a los presentes en la protesta fue el de Olga Nayeli Sosa Romero, de 35 años de edad, quien hace dos años fue asesinada, descuartizada y enterrada por su esposo, un médico cirujano, en un municipio de la Mixteca poblana.
La madre de la fallecida indicó que a la fecha las autoridades no le han querido entregar los restos de su hija, con el argumento de que los necesitan para continuar con las investigaciones, además de que han actuado con opacidad y preferencia hacia el presunto asesino, hoy encarcelado, ya que éste cuenta con un familiar que es funcionario.
Los padres de las desaparecidas Blanca Estela Solar, de 16 años de edad, y Miriam Manzola Heras, de 21 años de edad, solicitaron el apoyo de la sociedad para localizar a estas dos jóvenes, pues aún no tienen pistas sobre su paradero y temen que hayan sido o estén siendo víctimas de algún delito.
La primera fue vista por última vez el pasado 12 de enero cuando salió de su domicilio, mientras que la segunda desapareció el 6 de febrero alrededor de las 3 de la mañana, luego que acudiera al antro Rumba Café de la avenida Juárez, donde festejó su cumpleaños con sus amigas.
Exigen la aplicación del protocolo Alba
María Eugenia Ochoa, representante de la Articulación Feminista Poblana, manifestó su preocupación por el recrudecimiento de la ola de feminicidios en la entidad, por lo que urgió al gobierno del estado a la activación de la alerta de violencia de género en los municipios con mayor incidencia de crímenes de mujeres o bien la implementación de las siguientes medidas:
-La aplicación del protocolo Alba para la búsqueda inmediata de mujeres desaparecidas sin importar su edad.
-La disposición de personal policial necesario para la pronta búsqueda de las mujeres desaparecidas, ya que en la actualidad los policías no cuentan con un enfoque de género ni con la capacitación para atender este tipo de situaciones.
-La atención oportuna a mujeres víctimas de violencia en los Ministerios Públicos, donde hoy por hoy se les culpa de los delitos que se cometen en su agravio.
-La realización de un diagnóstico oficial por parte del Instituto Poblano de la Mujer, cuyo papel no es activo.
-La conformación de una comisión revisora de expertas y expertos de todos los casos calificados como homicidios dolosos en los que la víctima sea mujer.