- Seguridad
Demanda CNDH a Puebla castigo por linchamiento en Ajalpan
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) deploró el asesinato de dos jóvenes en Ajalpan, Puebla, cuyos cuerpos fueron quemados por pobladores, tras acusarlos de intentar plagiar a una menor de edad.
El organismo demandó justicia para las víctimas y sus familias, mediante una investigación “seria y profesional” que permita ubicar a los responsables, para que sean castigados de acuerdo con la ley y no haya impunidad, además que exista reparación integral del daño.
A través de un comunicado, la CNDH destacó que el fenómeno del linchamiento o “de la justicia por propia mano y la frecuencia con que se ha presentado en el estado de Puebla evidencia la fragilidad del Estado de Derecho, que establece los procedimientos e instancias para el acto de juzgar las conductas delictivas de las personas”.
Refirió que a los ojos del país y del mundo se pone de manifiesto la existencia de sociedades que no sólo muestran su falta de respeto a la ley, sino que recurren a vías injustas para aplicar la justicia.
“Nada hay que respalde o justifique esas conductas bárbaras en nombre de la justicia, ni aún en aquellos casos en que se puedan regir por usos y costumbres, porque toda conducta tiene como límite los principios de la Constitución General de la República, el respeto a los derechos humanos y, de manera relevante, el respeto a la vida, la dignidad e integridad de las personas”.
La CNDH refirió que de acuerdo con distintos medios informativos, a lo largo de este año han ocurrido acciones similares en distintos lugares del estado, sin que haya evidencias de una acción de la autoridad para frenar tales hechos.
“De ahí, la señal de alarma que debe tomarse en cuenta para evitar la repetición de tales manifestaciones de carácter agresivo y para subrayar que todos debemos encuadrarnos dentro del margen de la ley, único instrumento que como sociedad nos hemos dado para normar la convivencia y las relaciones sociales”.
Por ello la Comisión expresó su deseo porque los gobiernos estatal de Puebla y municipal de
Ajalpan frenen esas “conductas vergonzantes y reorienten el tejido social por el camino de la ley”.