El PRI y el Partido Verde impidieron que la Procuraduría General de la República atrajera el caso de los 5 crímenes cometidos en un departamento de la colonia Narvarte y además se negaron a apoyar la petición de que el gobernador de Veracruz, Javier Duarte, comparezca.

Durante la sesión, el diputado federal priista de Veracruz, José Alejandro Montano, expresó su reconocimiento a la Procuraduría capitalina, y el senador priista David Penchyna discutió con legisladores que criticaron a Duarte.

Los diputados se solidarizaron con los familiares de las víctimas y con el gremio periodístico y exhortaron a la Procuraduría capitalina a investigar el desempeño de Rubén Espinosa como periodista y el de Nadia Vera como activista.

Sin embargo, los legisladores criticaron la manipulación mediática que según ellos, realizó la Procuraduría capitalina y condenaron las primeras hipótesis del multihomicidio y los señalamientos dirigidos al gobernador de Veracruz, Javier Duarte.

Roberto Gil Zuarth, senador panista, advirtió que nos hemos acostumbrado a debatir los casos en los medios de comunicación y consideró que esa actitud  es también una causa de la impunidad, porque se realizan juicios paralelos.

“El asesinato de Rubén Espinosa es un problema político y también judicial. Es un tema político y una prueba de la crisis de derechos humanos”, sentenció Gil Zuarth, presidente de la Comisión de Justicia.

El legislador estableció que no se trata de un tema del Distrito Federal, sino del gobierno de Veracruz y de toda la federación porque los crímenes contra periodistas se han convertido en un asunto del Estado mexicano.