Said Robles Casolco, académico del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) en Puebla y miembro de la Escuela Nacional de Ingeniería del Tec de Monterrey, aseguró que la visión empresarial y la trasferencia tecnológica, son los retos de los jóvenes investigadores.

Después de que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) recomendó detonar el desarrollo en la industria automotriz, agroindustrial, textil, salud, de energía y el sector universitario en Puebla, Robles Casolco destacó que es momento de que los inventores amplíen su visión y no sólo se enfoquen al desarrollo tecnológico o científico, sino en la aplicación de sus proyectos y en la solución de problemas de la sociedad.

“Ahora, es necesario que desde que genera una idea, los estudiantes la conciban como un producto, como una aplicación que debe llegar a la comercialización. Falta estrechar lazos entre la industria y la academia”, apuntó el miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) nivel 1.

El también galardonado por la empresa Alta Ventures como uno de los generadores de patentes más prolíficos de México, llamó a los estudiantes de nivel medio superior y superior a acercarse a las oficinas de transferencia de tecnología, y así consolidar su trabajo por medio del registro de patentes.

Comentó que los académicos y estudiantes pueden obtener fondos de entidades nacionales como el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología para desarrollar diferentes proyectos de investigación.

“Es necesario cambiar el paradigma de que inventor es una personal que puede contra el mundo. ¿Qué sucede con todas las patentes, se quedan sólo en el registro, cómo aportan un valor agregado a la iniciativa privada, realmente el inventor obtiene un beneficio? Son cuestiones que debemos tomar en cuenta desde el área de la investigación”, comentó.