Si quieres ser bruja, primero tiene que aprender de brujería y con toda certeza al comienzo todo te saldrá mal. Con esta ilusión quizá decidas ir a vivir al bosque, sola -porque ser bruja es una actividad solitaria- o bien en compañía de algún animal mágico (gato negro, búho sabio o cuervo). Lo más seguro es que en tu choza al inicio tendrás todo desordenado, porque todo principio es ignorancia y desorden. Y si insistes en que tu mayor deseo en la vida es ser bruja y lo has decretado ¡ya tienes una responsabilidad!, que es el mejor arranque, que no es cosa menor, pues tienes que poner todo lo que esté de tu parte -y más- para lograrlo ¡cueste lo que cueste!

Si insistes que tu mayor deseo es ser bruja puede ser que alguien te lo haya inspirado haciéndote sentir que ese es tu camino. Puede ser también que desde muy pequeña algo en ti sabía que tenías ese poder interior que debía salir, y para ello tenías que encontrar un guía y un camino. Si ese alguien está cerca de ti, significa que hay por lo menos otra bruja a quien conoces y, al descubrirle que tú también quieres ser bruja, te enseñará los pasos y el camino que debes andar: los hechizos, las pócimas y los conjuros, porque son muy, pero muy pocas las brujas que se hacen solas, siempre tienen un guía y comparten.

Para ser bruja debes sentir en tu interior que tienes un don especial para la magia, y que el maestro llega cuando estás lista; te iniciará, te auxiliará en la práctica, te afianzará en lo logrado y te ayudará a redefinir y replantear lo que está errando. Por lo que ser bruja no es fácil.

Las brujas, primero que nada, deben descubrir su propia magia interior, sentirla y percibir que es un don que viene del poder que encuentran en ellos mismos y lo agradecen al Ser que se los ha otorgado como regalo de vida: sientes que tienes un don. Descubres que tu don es cierto, que está probado. Quieres usar tu don y te comprometes con él. Encuentras un guía que te enseñe los primeros pasos para que poco a poco consigas tu propio camino (ninguna bruja es igual a otra). Practicas y practicas y practicas y aprendes, y descubres qué es la magia y de dónde viene. Puedes elegir un animal que te acompañe, ¿y luego?

Tienes que aprender que las brujas y los magos tienen un código secreto, un código de honor: no son públicas ni hacen público lo que intentan y logran. Viven en una comunidad comprometida con la discreción, la confidencialidad y la secrecía de lo que hacen y del grupo al que pertenecen. Actúan con sigilo y reserva.

La bruja tiene el arte de hacer cosas imposibles o inexplicables; tiene la técnica para manipular la realidad mediante rituales, símbolos y energías ocultas; en su práctica combina la habilidad, el engaño y la ilusión creando lo sobrenatural.

¿Quieres ser bruja?

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