"Nunca se supo rajar", es el epitafio que fue colocado en el interior de la capilla donde fue sepultado Miguel Barbosa Huerta, la tarde de hoy 15 de diciembre.

La capilla es propiedad de la familia Barbosa y ahí yacen más restos de consanguíneos del exgobernador de Puebla.

El edificio funerario se localiza en el segundo anexo del Panteón Municipal de Tehuacán de la sección B; en ese sitio se encuentran los restos del padre del exgobernador y de uno de sus hijos que perdió la vida siendo un bebé.

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Cuenta con ocho fosas y 12 gaveteros, de manera periódica recibe mantenimiento y es ahí en donde ahora descansan los restos de Luis Miguel Barbosa Huerta, originario del municipio de San Sebastián Zinacatepec y radicado en la ciudad de Tehuacán durante varios años.

Miguel Barbosa Huerta murió el 13 de diciembre por un infarto que en un principio se le atendió en la ciudad de Puebla, sin embargo, más tarde fue trasladado a la Ciudad de México en donde a pesar de las labores médicas, perdió la vida.

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El cuerpo fue trasladado esa misma noche del 13 de diciembre a la Capilla Mayor del Velatorio Camino al Cielo, en Puebla, donde políticos, amigos cercanos y conocidos se acercaron para despedirse.

Al siguiente día, el 14 de diciembre se realizaron tres homenajes de cuerpo presente en la ciudad de Puebla, en edificios sede de cada uno de los poderes: Congreso del Estado, Palacio de Justicia y Casa Aguayo. Esa misma tarde el féretro arribó a la ciudad de Tehuacán para ser velado.

En tanto que hoy 15 de diciembre se ofreció una misa de cuerpo presente en la Catedral de la Inmaculada Concepción, para más tarde llevarlo a su última morada, la capilla de la familia Barbosa, en el Panteón Municipal de Tehuacán.