En el emblemático Museo Nacional de Antropología e Historia, el Presidente de la República Enrique Peña Nieto, presentó al país lo que ha denominado Estrategia Digital Nacional, la cual tendrá por objeto hacer el mejor uso de la tecnología para detonar el desarrollo de México, y como se dijo en el acto de presentación, viendo a la tecnología como un medio y no como el fin en sí mismo. Definitivamente, este mundo moderno transita –a una hipervelocidad- por la supercarretera de la informática,  quien no lo entienda y se adapte, quedará cada vez más y más rezagado en el ámbito de competencia mundial.

México está decidido a romper inercias y cambiar paradigmas. Así lo ha acreditado el país este año, con el impulso y aprobación de importantes reformas transformadoras. Este argumento, que pareciera reiterativo, es el símbolo de la época. Cambiar, transformar, modificar y dar la vuelta de tuerca necesaria para hacer una sociedad más moderna, innovadora e inspiradora. Eso se ha propuesto este Gobierno con su Presidente por delante, y en cada paso va la marca definitoria. Es básico entender que cada acción ha sido medida, calculada y programada en su tiempo oportuno. Incluso el mismo desgaste de la figura presidencial fue debidamente ponderado, en donde el bien superior –los cambios estructurales- se impusieron sobre cualquier interés particular. Hoy sabemos que tenemos un líder que le apuesta a pasar a la historia por haber cambiado al país y no por estar en una zona de confort, administrando su imagen. Y es que el resultado bien vale la pena. Lograr cambiar las estructuras anquilosadas de un sistema que se resiste a morir, en tan solo un año, será un hecho histórico que deberá ser apreciado en su justo valor con el paso del tiempo.

Volviendo al tema, sin duda la Estrategia Digital de Peña Nieto tendrá varios significados, conforme a los objetivos que se plantea. Primero: Transformación Gubernamental. A partir de políticas para un gobierno digital, se construirá una nueva relación entre el Gobierno y el ciudadano. Se creará la Ventanilla Única Nacional para poder efectuar más de 7000 trámites, en un mismo sitio de internet.

Segundo objetivo: Economía digital. Para democratizar la productividad e incrementar el crecimiento y la generación de empleos, se debe facilitar la incorporación de tecnología en los procesos económicos.

Tercero. Educación de calidad. Como parte de la Reforma Educativa, se integrarán  las Tecnologías de la Información y Comunicación en la formación de nuestros niños y jóvenes.

Cuarto objetivo. Salud universal y efectiva. En la construcción de un Sistema Nacional de Salud Universal se deberá aprovechar la tecnología para aumentar la cobertura y hacer más eficiente la infraestructura y los recursos destinados a la salud, que se traduzca en un incremento a la calidad de los servicios que presta el Estado mexicano.

Y quinto. Seguridad ciudadana. Se usarán nuevas tecnologías en programas para prevenir la violencia y promover la comunicación entre ciudadanía y autoridades. También, para difundir información de Protección Civil y mitigar los daños causados por desastres naturales.

A resumidas cuentas, la Estrategia tendrá un carácter transversal para toda la administración pública federal, con el fin supremo de hacer de ésta, un agente transformador del cambio, que acelere la evolución de nuestra sociedad y que permita escalar peldaños entre las naciones latinoamericanas con los mayores niveles de conectividad a internet. Impulsando educación y por tanto democratizando la productividad. Un paso más en la ruta emprendida, precisamente en el año del cambio.