En lo que va del año las fronteras con Morelos, Tlaxcala y Veracruz se han caracterizado por ser tiraderos de cadáveres, lugares para operar secuestros y extorsiones, además del robo de combustible
Se presume que los hoy occisos se detuvieron para arreglar una llanta ponchada y en ese punto fueron interceptados por presuntos asaltantes, con quienes habrían forcejeado