La corrida Guadalupana a cargo de la empresa “Feria Toro” fue aceptable y el palco de autoridad concedió una oreja a Gerardo Rivera, una a Arturo Macías y dos a Óscar San Román
Laura, quien ese momento era menor de edad, dijo que Macías la invitó a salir y que les pidió permiso a los padres de ella para que fueran a comer y al cine.