El futuro no está predeterminado, pero sí podemos atisbar algunas cosas proyectando hacia adelante las posibilidades del presente. Pese al lanzamiento de José Antonio Meade como aspirante a la candidatura presidencial, el PRI podría desembocar en un desenlace paradójico. El que se trate del primero ‘externo’ al otrora poderoso  partido en el poder, tiene un peso específico importante. Por primera vez es evidente que el PRI ya no puede ganar las elecciones presidenciales en solitario (tampoco los otros, pero ahora el tema es otro). Como Partido Nacional Revolucionario, el PRI nació para dirimir ‘pacíficamente’ la sucesión presidencial y mantener en el poder a la élite vencedora de la lucha entre caciques y caudillos. En 1994, con el asesinato de Luis Donaldo Colosio y, ahora, con las tendencias que reflejan las encuestas sobre el voto anti-PRI y anti-sistémico, el partido fundado en 1929, ha perdido su razón de ser…

Al margen del resultado electoral de 2018, podría ser los estertores de la agonía. Presa de la euforia del destape ‘a la antigüita’, quizá les pase como a los que mueren con la adrenalina al tope: No lo sienten, hasta que ocurre el último latido…

“La sucesión según Peña Nieto…”

Descartó al mejor posicionado de los priístas: Miguel Ángel Osorio Chong. Con cierta rudeza, pues en la víspera se filtró el tema de las constructoras hidalguenses. Se temía una rebelión del secretario, apoyado por varios gobernadores afines. Osorio Chong está encargado de llevar a buen puerto el ascenso de Meade a la Presidencia y a contar con un titular de la FEPADE acorde con el objetivo. Desde el principio, el de Hidalgo no entraba en los planes del Presidente. El malestar ciudadano hacía inviable una candidatura ‘priísta’ y, además, Osorio Chong no tenía muchas posibilidades de crecer. Meade, sí…

La cosa está clara: Miguel Ángel no quiere encabezar al PRI e irá por el Senado. Sabe que, de un lado, podría encontrarse con Rafael Moreno Valle y, del otro, con Martí Batres, si en definitiva esa vía estuviese vedada para Ricardo Monreal. Los márgenes se acortan y el tiempo corre. Osorio Chong libra una feroz batalla por el control de la SEGOB. Cultivó una buena relación con Rosario Robles, pero a raíz del proceso electoral mexiquense, Miranda la comenzó a ‘jalar’ hacia el círculo de confianza de EPN. La salida de su hija de la dirigencia del PRI CdMx, facilitó la llegada de Eruviel Ávila a esa posición. Hoy, Videgaray quiere echar a Osorio de la SEGOB y entronizar a Rosario…

Miguel Ángel maniobra con los gobernadores para asegurar su llegada a la Cámara Alta. Videgaray teme que, de quedarse más tiempo en la SEGOB, la juegue por AMLO…

“Confrontación tecnocrática…”

Al interior del ámbito tecnocrático se libró una feroz batalla por la nominación y por la SHCP, entre Videgaray y Salinas. Salinas perdió en lo primero. Videgaray, en lo segundo. Luis jugó por Meade. Carlos, por Nuño. El canciller impulsaba a Messmacher, mientras Salinas apostó por su concuño González Anaya…

Aquí también es diáfano: El ala salinista-zedillista se consolidó con la Comisión Trilateral. La muerte de Zbigniew Brzezinski y los cuestionamientos de Trump a la élite trilateralista, fueron entendidos por el jefe de la diplomacia mexicana como el declive de sus aliados en México. Por eso Carstens se plegaba a las previsiones del FMI, mientras Videgaray y Meade pensaron que podían salir bien librados de la renegociación del TLCAN. Agustín Carstens se va, pero se impuso: Su carta para que ocupase su lugar, era Alejandro Díaz de León. Los vaivenes de la relación con Trump, calaron hondo en el ánimo presidencial y ganó Agustín…

“Manlio Fabio, centauro trans-priísta…”

Se acerca el fin del PRI (o al menos como lo hemos conocido en su tercera etapa) y Manlio Fabio lo sabe. ¿Podrá transitar hacia la cuarta etapa del Partido? El ala política de los poderes fácticos del PRI, ha estado dividida entre dos adversarios que, hasta ahora, han sido irreconciliables: Osorio Chong y Beltrones. Como acabamos de ver, los tecnócratas también pero se están acomodando. El sonorense bien mal con Meade, luego de haber vertido críticas en su contra por no militar en el PRI…

Meade también desconfía de Manlio Fabio. Aconsejan a EPN que sería un error ponerlo en la SEGOB, en el PRI o en el Senado. Lo quieren en un lugar donde cumpla su deseo de manejarse con cierta independencia y deshacerse de él cuando convenga o se rebele. Como vimos en otra entrega, la licencia de su yerno Pablo Escudero, luego que Cervantes naufragase, apunta a que será la nueva carta para ocupar la Fiscalía Anticorrupción. El conflicto con Beltrones no debe ser tan frontal, pues Pablo estará como ‘espada de Damocles’ sobre ellos. A menos que pretendan dar marcha atrás con lo previsto para Escudero, claro…

Aquí igualmente está como el agua: La gente de Videgaray empuja para que Manlio Fabio vaya a la Cámara Baja, mientras él responde que mantendrá su lealtad. Eruviel queda en un compás de espera: ¿PRI, SEGOB o Senado? Beltrones controlando la FA, mediante su yerno, y Osorio Chong operando la FEPADE para alguien de la oposición. Sí, pero de la que estuvo de acuerdo en respaldar a un candidato ‘no-priísta’. La complejidad de la sucesión presidencial que se avecina, hace impredecible el futuro del PRI…

Así como Pablo Escudero es ‘no-PRI’, la FEPADE tampoco puede quedar en un ‘PRI’. Lo único oscuro es la viabilidad, el futuro, del PRI. Hay que reconocer que el plan seguido por EPN no es descabellado…

“Esposas no-PRI…”

Técnicamente, el PRI ya no es viable. Así como está lanzando a su primer aspirante externo para Los Pinos, es la primera vez que se coloca en contraposición con las causas de su fundación. En ese trance, la Vieja Guardia podría tener un papel o no. Gane quien gane, el PRI está liquidado. Un eventual triunfo en 2018 podría amortiguar el impacto, pero nada más. La competencia es de tal magnitud que hasta las esposas pesan de cara a la opinión pública. La imagen de Juana Cuevas coincidió bien con la que se deseaba proyectar de Meade: Un aspirante con vida familiar. Un candidato honrado necesita una esposa con autoridad moral y ella reúne los requisitos…

Beatriz Gutiérrez Müller, la esposa de Andrés Manuel López Obrador, acaba de dar la sorpresa de que, junto a su indudable preparación intelectual, también canta. AMLO se muestra como honesto y, si lo vemos bien, forcejea con Meade en ese rubro. Por cierto: ‘candidato’ viene de ‘cándido’, que hace referencia a una prenda o vestimenta blanca. Es decir: honesto, honrado. Los escándalos de corrupción y el hartazgo ciudadano, hicieron inviable a alguien identificado con el PRI…

Este es un punto débil de Ricardo Anaya. Ha llegado el momento en que su esposa debe salir a la plaza pública. Carolina Martínez me parece una buena persona y se puede pensar que Ricardo espera que se cumplan los plazos en el Frente Ciudadano, pero es de alto riesgo esperar demasiado…

Una vez más, el asunto es transparente: Juana, Beatriz y Carolina, proyectan imagen de honestidad, inteligencia y sencillez. Esposas ‘no-PRI’, finalmente…

“Gane quien gane…”

Gane quien gane, al PRI podría irle muy mal. De origen, fue la viva traición al ideal maderista. Su marcada referencia a la ‘Revolución’ no es a la de 1910, sino al Nacionalismo Revolucionario que emergió a partir de 1917. Luego del asesinato de Madero, se derivó en los de Villa y Zapata. Ese Nacionalismo Revolucionario es el que los tecnócratas, con respaldo de panistas e izquierdas, desea liquidar. Pero hablamos de dos cosas: El fin del PRI en cuanto tal o el término de su tercera etapa y el posible arranque de la cuarta…

Si ganase AMLO, como indican las encuestas que lo colocan en la cima, el PRI sería desmantelado. Sin duda, la Vieja Guardia emigraría hacia MORENA, como de hecho lo ha estado haciendo. Andrés Manuel no cierra la puerta a los tecnócratas, aunque en el discurso truene contra ‘la mafia del poder’. De un lado, valora incluir a Esteban Moctezuma y, del otro, su vínculo con Alfonso Romo es fuerte…

De ser Anaya candidato y alzarse con el triunfo, habría un ajuste de cuentas. ‘El Cerillo’ quiere ‘cobrar facturas’ tanto al PRI como a los llamados ‘panistas rebeldes’. Muchos de los primeros, no dudarían en buscar refugio en MORENA, para escapar del asedio anayista. El punto toral es que el dirigente del PAN se encaminaría no sólo a ganar la Presidencia, sino también a desmontar el aparato priísta de poder. Y un PRI sin poder de facto, carece de sentido…

¿Y si triunfase Meade? Obtuvo el respaldo de los sectores tradicionales del Partido, pero a regañadientes. Hoy, Ochoa Reza busca ganarse la simpatía de las bases y la estructura, para la campaña. ‘Echaron toda la carne al asador’, con tal de configurar un escenario bipolar (PRI-MORENA, Meade-AMLO), dejando a Anaya y al Frente en un lejano tercer lugar. Ulteriores estudios de opinión, nos dirán si resultó bien…

Meade me parece una persona honesta y honrada, que ha ocupado cargos de alto nivel en materia económica y financiera. Está en juego su prestigio dentro y fuera del país. Lo quiero ver negociando en privado con caciques y líderes de redes clientelares, no sólo repartiendo espacios, sino ‘respetando’ feudos y manejos ‘por debajo de la mesa’. Sobre todo cuando esos pactos pongan en peligro metas y fortaleza de las finanzas públicas, aspecto toral en un mundo global…

“El aullido del lobo…”

Los tecnócratas se propusieron iniciar la cuarta etapa del PRI y fracasaron. Ahora, la realidad apremia porque el Partido no encaja en el siglo XXI. Hasta las encuestas lo registran. El que los ‘panistas rebeldes’ manifiesten su simpatía y respaldo hacia Meade, no es cuestión puramente electoral. Muchos de ellos se formaron en el grupo de Videgaray. ‘Es la manada acudiendo al aullido del lobo’. Se avecina una disputa por el control de la transición del PRI. ¿Quién quedará en pie como líder de la manada? ¿Salinas, Videgaray o Meade? Hoy, se escuchan voces que claman por lo que Krauze llamó: ‘Un suave parricidio’, al referirse al exilio de Calles por parte de Cárdenas. Piden a Meade sacudirse la presencia del canciller y no faltan los que ven la mano de Salinas, para que Meade quede a su merced…

Para evitar quedar como pelele, Meade va a necesitar a Ernesto Cordero, a Roberto Gil Zuarth y a los ‘panistas rebeldes’, incluyendo a los zavalistas (si Margarita no juntase las firmas o no pudiese ganar)…

Si en el PAN, a su vez, Anaya dejase a Ernesto Ruffo al frente del Partido, sería el retorno del ‘panismo bronco’. Ese que ganó la primera gubernatura. No cabe duda, un sector del panismo tradicional viene jugando bien sus cartas. Parte de que el PAN también requiere una transición. Va por ejercer control de daños con los zavalistas, deshacerse de los ‘rebeldes’ y frenar a Rafael Moreno Valle rumbo a 2024. Ahí está ‘aullando otro lobo’…

Hasta entonces…

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