“Perseverar más allá de lo humano”

Parece que todo se inició de una necesidad de verse y convivir. Se trata de un grupo de amigos conocidos en febrero de 1989; en el marco de la  celebración del XV Congreso Nacional Ordinario del Comité Ejecutivo Nacional del SNTE.

En esos días fuimos testigos del poder efímero y prestado de los líderes que se creyeron imbatibles ante cualquier otro poder que no fuera el propio ejercido contra un magisterio sometido por muy sutiles mecanismos de control y otros no tanto que tuvieron visos de gansterismo y violencia.

Eso fue Vanguardia Revolucionaria del SNTE por cerca de dos décadas; de septiembre de 1972, a abril de 1989. Un periodo de corta duración; pero de transformaciones culturales de involución en un magisterio al que se llegó a considerar un apostolado y ahora, lo que el SNTE deja como saldo, es a un magisterio moral y socialmente devaluado.

¿Dónde quedaron los sueños de J. Vasconcelos que creyó reconstruir la continuidad del trabajo de los misioneros franciscanos del siglo XVI para la Escuela Pública en 1921?

Un periodo –el de Vanguardia Revolucionaria y el posterior de los “institucionales”, en el que aparecieron la doble plaza; el Esquema de Educación Básica y el control del SNTE sobre el escalafón de mandos. Fue un periodo de gran expansión del sistema educativo y los líderes del SNTE se enriquecieron con el tráfico de influencias y la venta de plazas. La corrupción se convirtió en un estilo de vida del magisterio en su conjunto.

Sí, allá –en Chetumal- vimos a don Carlos, líder vitalicio e inmortal del magisterio, vimos a los grupos de maestros que solicitaban sus favores para ser impulsados a puestos sindicales y de elección popular, Allá llegaron “las águilas caídas”, unas viejas alcahuetas que llevaban a unas niñas a la cama del líder, en medio de lamentos por el trato recibido del secretario de finanzas que no les dio boletos de avión y fueron enviadas en autobús.

Después de la inauguración del Congreso, el líder Carlos corría entre un tumulto de guaruras y guardias presidenciales para subirse al autobús presidencial, los que le dieron con la puerta en la nariz. Solo la señora Elba Esther acompañaría al Presidente Salinas, signo de una nueva era sindical.

Los días y semanas que le siguieron –al congreso- fueron un detonador del fin del poder absoluto de don Carlos Jonguitud Barrios. El Secretario General que impuso don Carlos, don J. Refugio del Ángel renunció el abril de aquel mismo año, aún en los fragores de un magisterio movilizado y que se calculaba en más de medio millón de trabajadores de la educación. De inmediato, el XVI Consejo Nacional elige a Elba Esther Gordillo Secretaria General del CEN del SNTE, hasta el mes de febrero de 2012, en que fue destituida y encarcelada, defenestrada dicen y se impone desde la Secretaría de Gobernación al señor Juan Díaz

Estos maestros se dejaron llevar por una quimera. En enero de 1990, en el marco del Primer Congreso Nacional Extraordinario, aparece la figura de un nuevo liderazgo con rostro de mujer, con un discurso incendiario y pretendidamente democrático. En los resolutivos del Congreso por primera vez, se propone una Reforma Estatutaria del SNTE para reafirmar su carácter de “frente amplio”; se deja como compromiso, trabajar en un Congreso Extraordinario para que los trabajadores puedan ejercer su libertad política; el SNTE, ya no pertenece al PRI.

El voto secreto es un signo de democracia y se promete la representación proporcional en la integración de todos los órganos de representación, pero nada pasó. Así nació el Movimiento Democrático Nuevo Sindicalismo del SNTE y ellos – los que se reúnen en Chihuahua, lo fundaron en diciembre de 1989.

Elba Esther pagó a expertos de América Latina para diseñar el modelo de un nuevo sindicalismo para transformar al SNTE; de un sindicato corporativo, a un sindicato de servicios. Millones de pesos de los fondos de las cuotas de los trabajadores fueron empleados para transformar a los líderes agachones, en verdaderos liderazgos con capacidad de propuesta y con capacidad para ver los signos de los tiempos: el ascenso del neoliberalismo, la globalización del mercado y la mundialización de la economía. Los esfuerzos fueron inútiles, los viejos cacicazgos locales resistieron y siguen vivos y vigentes en las estructuras locales de poder.

Estos maestros son la memoria de un periodo corto, en donde políticos de izquierda diseñaron los nuevos estatutos del SNTE con nuevos y renovados mecanismos de control. Vanguardia Revolucionaria dejó de cantar su himno y abandonó las grandes concentraciones, pero siguió viva en los gestos del magisterio, incluso en los trabajadores de las expresiones pretendidamente democráticos. Las prácticas no cambiaron, adquirieron nuevos referentes y una nueva narrativa, pero no cambiaron las prácticas. El tráfico de influencias, la venta de plazas, ahora era un derecho. Unos en la inmovilidad y otros en la calle, pero nada cambió.

Luego vendrían las reformas a la educación pública. El sistema educativo se descentralizó por medio del Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica, se introdujo la Carrera Magisterial en sustitución del Esquema de la Educación Básica, el SNTE creó un fideicomiso para impulsar la vivienda magisterial pero a las pocas semanas de su creación, un fraude lo sepultó, nada cambió. Elba acaba de ser liberada de la cárcel, pero ha sido silenciada y sus fieles seguidores –si alguna vez  los tuvo- están encarcelados y silenciados junto a su líder que como los anteriores, se creyeron inmortales y  “vitalicios”.  

Los maestros que se reunirán este fin de semana, sábado 12 y domingo 13 de diciembre de 2015, van al reencuentro de los amigos, del compañerismo construido en ya dos décadas de sucesos políticos accidentados, van con su memoria y sus anécdotas, algunos son viejos jubilados, otros son jóvenes de reciente ingreso al Servicio Profesional Docente, van porque su persistencia no tiene límite, porque sacan fuerza de su dignidad y de sus errores, van al IV Encuentro Nacional de Diálogo Entre Profesores, se van a reunir en el auditorio del CECATI 137, calle Homero y Av. Venceremos, de la colonia Revolución de Chihuahua, Chihuahua.

Si, también son actores de las luchas democráticas de México, estuvieron con Heberto Castillo y luego con Cuauhtemoc Cárdenas, luego vendría el fenómeno Andrés Manuel López Obrador y ahí los vi, ahora, están preocupados por las reformas estructurales, por la evaluación punitiva impuesta a los maestros y van por el compromiso de la defensa de la Educación Normal. Aún pueden hacer mucho, les deseo éxito en su empeño (6-de diciembre de 2015).