David Colin es un joven originario de Ajalpan que llegó a la ciudad de Puebla para profundizar sus estudios como percusionista, para ello se inscribió en la Universidad Tito Puente… Sin embargo, sus familiares acusan que fue víctima de discriminación por parte del rector Juan Villalobos, aunque la institución afirma que no estaba inscrito.  El caso ya fue denunciando ante la CDH Puebla.

En entrevista para e-consulta, Elisa Colin, hermana de David, compartió que su hermano se contactó por WhatsApp con la universidad ubicada en la colonia Granjas de San Isidro.

"Él tuvo comunicación por WhatsApp con la Universidad Tito Puente. Mandó unos mensajes donde decía que tenía interés en recibir clases de percusión (...) Le dicen que ya se presente, que a partir de ahora tiene que pagar la inscripción, bueno, los pagos mensuales, que ya se puede presentar para el sábado, entonces mi hermano acude a su primera clase", explicó.

Después de insistir por algunos días le compartieron información sobre la mensualidad y el número de cuenta al que debía depositar; en total fueron 2 mil pesos los que pagó para tener clases sabatinas de una hora.

Su primera clase fue el sábado 5 de octubre, ese día presentó toda su documentación para ser dado de alta en el sistema, hizo amigos y conoció a sus maestros.

Ese día no pudo conocer al rector Villalobos, pero se llevó un buen sabor de boca de la institución y se lo contó a su familia de regreso a Ajalpan.

"Llega la escuela. Toma su clase por primera vez, el rector no lo vio, o sea, mi hermano no vio la primera clase al rector (…) Hizo algunos amigos y se vino muy contento", explicó.

David sufre discriminación por su peso, acusan

El 12 de octubre de nueva cuenta debía ir a tomar clases. Todo se desarrolló de buena manera hasta que salió a la cafetería con sus amigos y el profesor Ricardo Cristales.

Ahí el rector Juan Villalobos lo vio y llamó. David se acercó para saludarlo, pero Villalobos no le respondió el saludo, al contrario, le preguntó por qué estaba en la universidad y después le pidió que pasara a la dirección junto con el profesor Cristales y la directora administrativa, Violeta Arellano.

En la privacidad de la dirección, le pidió apagar su teléfono y entregarlo a la directora. Después el rector le dijo que no iba a aceptarlo en la universidad porque con su peso “iba a dañar el mobiliario de la universidad” y salía más caro reparar eso que lo que la institución recibiera de su colegiatura.  

"Le dice que de haber sabido que era él no lo dejaba inscribirse, que estaba muy pesado, que con su peso iba a dañar sus bancos, iba a dañar el banco de la batería y no era negocio (…) Le dijo ‘me sale más caro reparar mis bancos que vas a echar a perder que lo que tú me vas a pagar de colegiatura’", relató la hermana.

Ante esto David le dijo que si el problema eran los bancos, que lo dejara traer el suyo para no dañar el mobiliario, pero que lo dejara estudiar. Ante esto el rector de forma irónica le dijo: "no creo que existan sillotototas, en mi universidad no las hay".

Incluso Juan Villalobos le puso de ejemplo el caso de otro estudiante que por su peso dañó el mobiliario y no quería que eso volviera a suceder, por lo que le pidió retirarse de la universidad.

El impacto para el joven estudiante fue tal que perdió su cartera y no tenía como regresar a Ajalpan. Después de hablar con su mamá y hermana lograron calmarlo y pudo volver a su municipio.

Presentan denuncia ante CDH por discriminación en escuela Tito Puente

Después de estos hechos la familia de David lo apoyó y tomaron la decisión de ingresar escritos a la Secretaría de Educación Pública (SEP), a Gobernación y denunciaron al rector ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla (CDH Puebla).

Luego de que se hiciera público este hecho, la universidad emitió un comunicado deslindándose y asegurando que David no fue su estudiante.

"Lo único que pedimos es que se haga justicia, que se reparen los daños… lamentablemente nos tocó a nosotros y que no vuelva a pasar. Que la SEP y estas dependencias que promueven, promulgan y defienden los derechos humanos no dejen a cargo de una institución a un maestro que rompe sueños y va a romper los sueños de muchas personas, de muchos jóvenes", dijo Elisa.

David y su familia esperan que las autoridades tomen cartas en el asunto para que haya justicia para su hermano y se repare el daño que sufrió. (MCJ)