La falta de un relleno sanitario en Tehuacán dificulta las jornadas de descacharrización, lo que afecta la recolección de objetos que favorecen la propagación del dengue en viviendas y espacios públicos.

El epidemiólogo de la Jurisdicción Sanitaria 10, Noel López Benavides, señaló que la gestión de residuos es un problema sensible en la demarcación. Esta situación impacta directamente en la efectividad de las campañas de recolección de cacharros.

De acuerdo con las autoridades municipales, en años anteriores, durante las jornadas mensuales de descacharrización, se lograba recolectar entre 30 y 40 toneladas de cacharros, pero la cifra ha disminuido significativamente.

"Hemos hecho descacharrización, pero la realidad es que no como en años anteriores que contábamos con el relleno sanitario. A diferencia de otros municipios, se ha logrado la afectividad de las campañas con el apoyo de la ciudadanía", comentó el epidemiólogo.

López Benavides explicó que hay varias casas abandonadas y predios deshabitados que presentan dificultades de acceso y acumulan cacharros, lo que incrementa el riesgo de propagación del dengue.

También mencionó que en años anteriores los vectores acudían a fumigar a determinado punto, pero luego de que personas ajenas se hicieron pasar por personal de la dependencia para cometer robos, los ciudadanos se volvieron reacios a permitir el ingreso de los trabajadores.

Ahora, las fumigaciones se realizan con el acompañamiento de la Policía Municipal, tanto en la vía pública como dentro de las viviendas. (APP)