Angelica Rojas, policía municipal de Puebla, es una mujer que además de cuidar a la ciudadanía y poner en riesgo su vida también es madre de un pequeño de once años de edad. Señala que combinar facetas es complicado y a la vez satisfactorio; la recompensa de su trabajo es llegar a casa y ser recibida con abrazo de su pequeño, quien le asegura estar orgulloso de ella.

La apariencia de Angelica como policía municipal de Puebla es el notarse seria. Asegura que por su oficio siempre debe estar alerta y vigilar que no ocurra algún delito, tener una imagen dura y a la par ser precavida, estar pendiente. Lo que pocos saben es que ella no solo es servidor público, sino que también es madre.

En entrevista con e-consulta, la oficial Angelica Rojas indicó que labora en la corporación policiaca desde hace siete años, tiempo en que arriesgó y arriesga su vida con tal de salvaguardar la seguridad de la población, a pesar de tener un pequeño que la espera en casa.

Admitió que el desprenderse de su pequeño fue complicado pero a la vez gratificante, ya que su hijo le dice lo orgulloso que se siente de ella. Esas palabras, sostiene, le sirven de impulso y “le inyectan las ganas de continuar su profesión”.

Señaló que cuando ingresó a la corporación su hijo tenía cuatro años de edad y que como estaba muy pequeño le costó trabajo hacerlo; “El rol de ser oficial y ser madre si ha sido un poquito complicado pero al final del día el amor al servicio es importante, me siento orgullosa de mi trabajo, el desprenderme de mi hijo y él de mí sí nos ha costado a ambos mucho trabajo”.

La oficial de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) mencionó que sin el apoyo de su madre nada hubiera sido posible, pues es su progenitora quien cuida de su hijo mientras se encuentra cumpliendo sus jornadas de 24 horas como policía.

“Le agradezco mucho a mi madre por la labor que hace, ella es quien me ayuda a cuidar a mi hijo, ella y yo nos hemos combinado este trabajo de ser mamás, a mi madre le agradezco mucho esta labor que hemos estado haciendo juntas ella como madre y como abuela”, dijo.

Aunque es complicado, indicó que gracias a su labor tiene diversos beneficios que le permiten crecer en la corporación y, económicamente hablando, “seguir de pie”.

Angelica Rojas señaló que al momento de llegar a casa, el quitarse el uniforme automáticamente toma su rol de ser mamá, de estar pendiente de su pequeño, jugar con él, abrazarlo y aprovechar al máximo el tiempo que comparten.

Finalmente mencionó que este 10 de mayo, la SSC de Puebla les otorgó a las policías que son madres descansar para celebrar el día, por lo que Angelica aprovechará este viernes para festejarlo al lado de su madre y de su hijo. (JRLM)