Para quienes han vivido a través del arte, el mundo se observa de forma diferente.  La disciplina, el compromiso y la pasión se asume como forma de vida, en donde el corazón se transforma a partir de la belleza, ese corazón que una Prima ballerina como Elisa Carrillo deja en el escenario en cada movimiento y posición, en cada giro y en esa sonrisa que nunca la abandona para tocar el alma de quien asiste a cada una de sus interpretaciones.

Tener la oportunidad de explorar el mundo a través del arte es una condición que a la artista mexicana le ha permitido aproximarse a esa templanza que la ha hecho superar los restos que se ha impuesto desde edades tempranas, pero también la ha acercado para encontrar en el ballet clásico un lenguaje para transmitir esperanza y la posibilidad de saberse libre para llevar esas emociones en un espíritu fuerte y solidario a través del mundo.

Su gran talento y genialidad la han llevado a brillar y llevar a México en cada uno de sus logros con un estilo que la ha distinguido a lo largo de su vida fuera de su país, donde ha conformado una gran comunidad de artistas en torno a ella, que hoy se traduce en un proyecto dancístico que trae a nuestro país a lo más destacado de las compañías de ballet del mundo a través de ‘Elisa Carrillo y amigos 2023’, Gala de Estrellas, que con una gran tradición regresa a la ciudad de Puebla en este mes de julio, auspiciado por el Gobierno del Estado de Puebla y  la Organización Mexicana para los Derechos Culturales.

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La primera bailarina del Ballet Estatal de Berlín compartió con e-consulta desde Alemania, su segunda hogar, los sueños que la han llevado al diseño de un programa muy ambicioso para traer a nuestro país una gran muestra de ballet clásico y danza contemporánea; lo que representa la Fundación Elisa Carrillo y aquello que extraña cuando regresa a su vida cotidiana en el país europeo.

​Elisa Carrillo, de México para el mundo

Nacida en Texcoco, Estado de México en 1981, comenzó a bailar a la edad de cinco años en una academia privada, donde identificaron sus aptitudes para hacerlo de manera profesional. Cursó la carrera de Ballet en la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea del INBA. Ganó una beca a Londres en The English National Ballet School. Consiguió un contrato en el ballet de Stuttgart de 1999 hasta 2007, logrando ser solista.

Elisa Carillo es contratada por Reid Anderson, director artístico del Stuttgart Ballet de Alemania, donde se consolidó como solista mientras cursaba estudios titulándose como maestra de Ballet en el Ministerio de Cultura de la República Federal de Alemania.

También fue la primera mexicana en recibir el premio más importante de la danza que entrega el Teatro Bolshoi de Moscú por su interpretación del clásico Romeo y Julieta. Ganadora del premio Benois de la Danse 2019 otorgado por la Asociación Internacional de la Danza. Además, recibió el premio del Festival Internacional Dance Open de San Petersburgo y el Alma de la Danza. Elisa Carrillo es la primera mexicana que interpreta el papel principal en "Bolero" de Maurice Béjart.

Actualmente es embajadora de la cultura mexicana, miembro del Comité Internacional de Danza de la UNESCO y del Comité de Diplomacia Cultural Mexicana, presidenta del Comité de la Fundación Elisa Carrillo Cabrera A.C, codirectora de la Compañía Nacional de Danza de México, y maestra en Ballet otorgado por el Ministerio de Cultura de Alemania.