Carlos Alcaraz ya no es solo la joven promesa del tenis español cuando acaba de ganar su primer Grand Slam, conseguir el número 1 del mundo y ser, además, el más joven en la historia en subirse a la cima del Ranking ATP. El murciano ha cambiado para siempre la forma de ver este deporte debido a que más arriba de él ya no hay nada ni nadie.

El US Open fue como darle las últimas pulidas a su número 1, uno que estuvo listo para estrenarse desde que cayeron en este torneo Rafael Nadal y Daniil Medvedev, dos rivales que podrían haberle estropeado el camino y que se despidieron pronto. Pero para la narrativa de esta historia hay que voltear a ver a un tercero: Casper Ruud, a quien derrotó en la gran final en solo cuatro sets.

Los números de 4-6, 6-2, 6(1)-7(7) y 3-6 le sonrieron a Carlitos para dejar el partido servido y con un destino que ya todos sabíamos: que uno de los dos presentes sobre el Arthur Ashe Stadium iba a terminar como líder.

El camino a las coronas

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Luego de que el español se hiciera del primer episodio con duelo cerrado, el segundo set nos deparó sorpresas con un inicio más que parejo, hasta que en el sexto game fue ahora Ruud el que le quebró el servicio a Alcaraz para estirar su ventaja (4-2) y no volver a mirarse abajo en el parcial. Segundos después, el noruego confirmó el quiebre y fue solo una doble falta del español lo que dejó al nórdico en igualdad de condiciones.

Back-and-forth we go!

Ruud breaks back for 2-2 in the third. pic.twitter.com/QKdIwgRoTI

— US Open Tennis (@usopen) September 11, 2022

Con las cosas en 1-1, el tercer parcial tuvo que ser otro duelo de paridad. No obstante, el parcial se tuvo que ir hasta el tie break después de que Ruud llegó a tener un punto para set con el servicio del murciano. Pero fue ahí donde Alcaraz no dejó dudas de su enorme potencial: utilizando su drive de derecha casi como norma, el español ganó por 7-1 para ponerse al frente en el resultado y quedar a solo una manga de levantar el codiciado título.

Hubo solo un camino seguido y fue el de adueñare del cuarto parcial. Lo volvió a dominar con su juego lleno de stamina y fuertes golpes, así como el carisma natural de sus 19 años para quedarse con el 6-3 definitivo.

El resultado más cercano a este había sido unos cuartos de final en Grand Slam, aunque desde entonces tenía claro el papel que maneja el control de las emociones para llegar a instancias como la de hoy.

Por otro lado, Alcaraz es el quinto español en ser número uno del mundo, pues antes de él lo lograron Arantxa Sánchez Vicario (1995), Carlos Moyá (2003), Juan Carlos Ferrero (2003), entrenador de Alcaraz, y Rafa Nadal (2008).

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