- Cultura
¿Cómo Simone Weil acercó la cultura a la clase obrera?
Hace 92 años ya, una mujer francesa del siglo pasado planteó la necesidad de acercar la cultura a la clase trabajadora, de brindarles traducciones de obras importantes no sólo en cuanto a idioma, sino narradas en términos que pudieran tocar su alma: su nombre era Simone Weil.
Ella cuestionó el compromiso social de escritores que tenían gran influencia y, sin embargo, no hacían nada de provecho con éste porque no querían o porque habían olvidado cómo hablar de problemas, personas y situaciones reales.
Simone Weil, fue una filósofa, escritora, traductora, profesora, obrera y activista política, que nació en París, Francia en 1909. Desde muy joven demostró tener un espíritu profundamente atormentado por los conflictos sociales y las cuestiones de la existencia; era una mujer que aspiraba a impulsar una revolución que trajera pan y cultura a las clases bajas, no del modo “Pan y circo” sino de esa forma, muy rara hoy y entonces, en donde se les considera individuos pensantes y con dignidad.
RT BooksPlayGround: “No puedo sentirme feliz ni comer a gusto cuando siento que mi pueblo sufre”.
— allsetic (@allsetic) August 24, 2018
Obrera, sindicalista, filósofa y combatiente en la Guerra Civil española, Simon Weil murió el 24 de agosto de 1943, desesperada por no poder marchar al fr… pic.twitter.com/Bf52qiAna6
Para Weil una clase obrera informada y alimentada era totalmente posible si es que los individuos estaban dispuestos a prestar atención a lo que les rodeaba. Desde su perspectiva uno podía acercarse a la verdad de sí mismo y del mundo desde la observación, no hacía falta comprenderlo todo desde la inteligencia rigurosa, sino que por medio de la reflexión podía el sujeto aproximarse a la sabiduría. La palabra filosófica se hallaba en todas las cosas, particularmente en la literatura, y siempre hablaba de la soledad y la fragilidad del ser humano inserto en un mundo plagado de belleza.
Una pieza clave en su pensamiento era el amor, no del tipo romántico, sino como sentimiento fraternal que une a los seres con una fuerza superior, pues, aunque vivió gran parte de su vida en conflicto con la iglesia, la espiritualidad formó parte de su cotidianidad a través del contacto con los otros.
Para Weil, el sentimiento del amor surgía de todos lados y lo que sea que nos orillara a él se presentaba verdadero, bello y generoso.
La voz de la francesa dejó huella, no solo en cuanto a algunos de los pensadores más importantes de nuestro tiempo reciente (Simone de Beauvoir, Albert Camus y T.S. Eliot, por mencionar algunos), sino también a través de su obra y su vida que nos siguen demostrando que “amar y ser amado se sirven mutuamente para hacer de la experiencia algo más concreto” y que el amor al prójimo puede transmitirse a través de las muestras más simples de atención.