Vecinos que habitan cerca del panteón municipal de Ixcaquixtla, alarmados por el fuerte olor proveniente del cementerio, informaron que, debido a la sobrepoblación de cadáveres, se ha procedido a amontonar los restos de los difuntos y solamente esparcen una capa de cal para disfrazar el olor y prevenir enfermedades.

Cabe recalcar que esta es solamente una de las irregulares detectadas en el panteón del municipio, pues reglamentariamente, la profundidad para las fosas debe ser de metro y medio; mientras que entre tumba y tumba debe existir una distancia de medio metro, medidas que no se cumplen en el panteón local.

Ante la inconformidad de los lugareños, el director del cementerio, Celedonio Miranda, narró que la situación de la sobrepoblación se presenta desde hace dos años y la solución más inmediata fue solicitar autorización de familiares cuyos difuntos tengan más de 25 años de antigüedad en el recinto para abrir las fosas y acomodar un cuerpo más.

En Ixcaquixtla se han registrado en promedio, 13 a 20 decesos mensualmente, de los cuales, más de la mitad son a causa del covid-19.

Actualmente el ayuntamiento emitió una solicitud dirigida a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales para el estudio de impacto ambiental, con el propósito de crear un nuevo panteón que brinde servicio a los pobladores de Ixcaquixtla y la junta auxiliar de Cuatro Rayas.