A revalorizar el trabajo y pensarlo como un bien común, llamaron investigadores de la Upaep.y del Observatorio de Finanzas, en Suiza, durante la conferencia Economía para el bien común.

La Dra. María Teresa Herrera Rendón, académica e investigadora de la UPAEP, María Teresa Herrera hizo un llamado para revalorizar el trabajo, pensarlo como un bien común; también para darle una función digna al trabajador. De igual forma, animó a repensar el mercado como un bien común, puesto que no es algo que se autorregule por sí mismo, mencionó que todos debemos colaborar como actores, debemos tener solidaridad para su correcta función.

En 2010, el PIB (Producto Interno Bruto) se repartía de la siguiente manera: 2.4 combustible y energía; .5 comunicaciones y transportes; .9 a vivienda; .2 a salud y solamente .1 para educación.

En 2020, se destinó de un total de PIB de 3.1%: 1.8 combustibles y energía; .2 comunicaciones y transportes; vivienda .7; .1 salud; .1 educación; .2 para otras funciones.

Por su parte, Paul Dembinski, director del Observatorio de Finanzas de Ginebra, Suiza. habló de tres niveles contemplados dentro de la economía del bien común: un nivel macroeconómico que incluye macro estructuras de gubernatura, a nivel internacional. Un nivel medio económico que implica comunidades, empresas y política regional. Por último, una microesfera en la que se desarrollan e interactúan actores como productores y consumidores cuya actividad se considera la base de la pirámide económica.

El académico hizo énfasis en la solidaridad como elemento crucial para la economía; mencionó que dicha solidaridad puede observarse en nuestro círculo familiar, en las empresas, en los actos filantrópicos y por último en los impuestos, gastos públicos que generan o no bienes públicos, los cuales son fundamentales para la solidaridad.

En la dimensión particular, en México y Latinoamérica surge el problema del trabajo informal. En México solamente, un poco menos de 60% del empleo son actividades informales, lo cual, se considera un problema conceptual y humano.

Cuando se habla de la dignidad del trabajo, debiera ponerse al centro de la discusión el trabajo informal, considerando sus riesgos y sus características, afirmó que no sabe si la formalización sea la solución, pero traerlo a debate apela a un acto de solidaridad.