Un golpe de suerte fue todo lo que necesitó el cuadro del Napoli para continuar con paso firme en la UEFA Europa League, donde ligaron su segunda victoria de manera consecutiva luego de tropezar en la primera fecha.

Increíblemente, la anotación del Rijeka llegó luego de un contragolpe. Napoli paseaba el esférico en área rival y un mal pase hizo que la defensa croata lograra hacerse con la bola. Tras avanzar a velocidad y llegar al arco, Robert Murić le pegó desde fuera del área para irse adelante en el marcador al 13’.

Antes de ir al descanso llegaron las combinaciones entre Elmas y Dries Mertens; el último mandó un centro al área que no pudo ser cortado por la defensa. Un par de rebotes y nuevamente un pase de Mertens al 43’ dieron a los visitantes la anotación que llegó gracias a la definición de Diego Demme, quien no hizo más que reventar el balón con pierna derecha para igualar las acciones.

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— Official SSC Napoli (@sscnapoli) November 5, 2020

La suerte fue italiana

El cuadro dirigido por Gennaro Gattuso pudo reaccionar con un par de acciones no sin antes ser víctima de un combinado griego que puso a trabajar a Alex Meret bajo el arco. Y aunque la igualdad parecía prolongarse, una llegada napolitana puso en aprietos al defensa croata Filip Braut, quien recibió un rebote accidental tras un cabezazo de Matteo Politano que terminó por dar la ventaja definitiva a los italianos.

De esta manera el Grupo F comienza a apretarse, pues Napoli se encuentra empatado en puntos (6) con el AZ Alkmaar y la Real Sociedad.

Hirving Lozano inició en la banca y entró al minuto 69 por Politano, quien dejó el campo con una tarjeta amarilla.