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Siguen amenazas contra padre de joven asesinado en San Pedro
“Tenemos en la mira a tu amiga Dulce, bájale de huevos. Es un aviso”, fue el mensaje que recibió Fernando Cadena, padre del joven Ricardo Cadena, asesinado por el entonces subdirector de la Policía Municipal de San Pedro Cholula, Jaid Mothe Hernández.
La amenaza salió del celular del abogado de Mothe Hernández, Rolando Romero Flores, aseguró el agraviado.
Fernando Cadena informó en rueda de prensa que además de la denuncia ante autoridades judiciales, tanto él como su familia y un grupo de jóvenes, que han conformado un colectivo que exige justicia para Ricardo, solicitaron ayer ingresar al Mecanismo de Protección para Defensores de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación Federal, ante el aumento de amenazas recibidas.
“El pasado 25 de mayo recibí el mensaje en mi teléfono y cuando remarqué el número del que provenía, confirme que se trataba del abogado del subdirector de la policía municipal de San Pedro Cholula, que asesinó a mi hijo. Sé que quieren amedrentarme para que no siga adelante con el caso” narró.
Explicó que Dulce, una amiga de la familia que ha acompañado sus exigencias de justicia, y él ya han recibido antes llamadas intimidantes, desde que han confrontado a autoridades por el asesinato de Ricardo Cadena y denunciado al ayuntamiento de San Pedro Cholula y a autoridades policiacas de proteger a Jaid Mothe Hernández.
Aseguró que también Jonathan y Heriberto, jóvenes que fueron testigos del asesinato de Ricardo, han sido hostigados por patrullas que les siguen y se estacionan afuera de sus casas.
Juan Carlos Solís, único latinoamericano finalista en los reconocimientos de la organización Front Line Defenders Award en 2015, reconoce la presencia de autoridades tras las amenazas.
“Es evidente que el abogado no pudo haber hecho esas amenazas de no sentirse protegido por otros grupos de poder”, dijo.
A la fecha, Jaid Mothe Hernández, el ex subdirector de la Policía Municipal que detonó su arma en la espalda del joven que transitaba con su patineta, continúa aun sin sentencia y autoridades judiciales retrasan su proceso.
Su defensa trata de reducir su condena cambiando el delito de homicidio calificado --lo que implica abuso de autoridad--- a homicidio culposo, estrategia a la que se apegaron desde el principio cuando Jaid Mothe se entregó a las autoridades confesando que Ricardo, joven que pesaba menos de 50 kilos, se le echó encima provocando que su arma de fuego se activara.
La intervención de autoridades y funcionarios favoreciendo al subdirector policiaco puede probarse, dijeron Juan Carlos y Fernando, con el cambio de peritajes del caso, pues existen testigos de que policías, manipulando evidencia, movieron el cadáver, y con el hostigamiento contra los principales testigos y las amenazas a familiares que siguen el proceso de parte de los abogados defensores.
Sigue persecución a jóvenes en Cholula
El defensor de la tierra y el agua, Juan Carlos Solís, denunció que la persecución que viven jóvenes en Cholula por policías es cotidiana: “son levantados por policías que roban su dinero y celulares y luego son aventados en la carretera o ingresados a la cárcel sin motivo alguno, acusándolos de tener droga”.
Solís sostiene que la discriminación y abuso de poder contra jóvenes y adolescentes en el municipio se ha recrudecido y aunque autoridades municipales cumplieron la recomendación 18/2015 de la CDHP reparando el daño material por el asesinato de Ricardo Cadena, nada ha cambiado en sustancia para que jóvenes tengan libertad de tránsito y el derecho al esparcimiento.
Fernando Cadena insistió en que el presidente municipal José Juan Espinoza ha incumplido el compromiso con la familia para honrar la memoria del joven con un parque skate, frente al IMSS, cuando a espaldas de familiares y jóvenes patinadores estaban ya iniciando los trabajos en el barrio de Jesús donde instaló una rampa.
Esto luego de que autoridades cholultecas aseguraran que el pago de indemnización a la familia, que develaron pese al acuerdo de reserva, era suficiente para que ya no hicieran más reclamos.