En 2011, Jamie Vardy jugaba en la séptima división de Inglaterra defendiendo los colores del Halifax, por lo que ganaba 30 libras semanales (600 pesos mexicanos) y combinaba el trabajo con un trabajo en una fábrica. 

Pero los años han pasado y Jamie logró llegar a la Premier League con el Leicester City, equipo que este lunes se proclamó campeón en Inglaterra luego del empate entre el Tottenham y el Chelsea.

Fueron 132 años los que el equipo inglés tuvo que esperar para proclamarse campeón de la mano de jugadores que nadie quería y por los que su actual equipo no pagó traspaso.

Jamie Vardy se convirtió en el hombre más decisivo para que este Leicester City alcance la gloria.

Además, el delantero marcó durante 11 partidos consecutivos, superando al holandés Ruud van Nistelrooy que había conseguido hacerlo en 10 encuentros seguidos durante su exitosa etapa en Manchester United en 2003.