Sepultar a una persona en Puebla es 158 veces más caro que en Tochimilco, ubicado a menos de dos horas de la Angelópolis, pues sólo el derecho de inhumación en los cementerios capitalinos cuesta 3 mil 883 pesos y en el municipio a las faldas del volcán Popocatépetl cuesta 24.52 pesos.

Los pagos funerarios no son los mismos en todos los lugares. En el estado de Puebla el derecho a ser sepultado en un cementerio municipal va de los 22.25 pesos a los 3 mil 883 pesos, por un lapso de siete años.

Si a eso se le suman otros desembolsos, como el permiso para construir una bóveda o si se coloca un nicho, los gastos pueden superar hasta más de 5 mil 900 pesos.

Puebla, cara para morirse

Sin duda la ciudad de Puebla es el municipio más caro para morirse. El derecho a usar alguno de los cementerios municipales, por siete años, incluyendo refrendo, cuesta 3 mil 883 pesos, y 500 pesos si es en panteones concesionados o privados.

A eso se le puede añadir el permiso para la construcción de una bóveda o cripta, que cuesta 2 mil 66 pesos; de una lápida, 138 pesos; de una jardinera, 134 pesos, y de un monumento, 259 pesos.

Pero si se trata de cenizas, el depósito a perpetuidad vale 3 mil 363 pesos; 217 pesos al año con mantenimiento incluido en el área de osarios, o de 3 mil 883 pesos por siete años.

Si se desea tener un nicho a perpetuidad sin límite de osarios o urnas, el precio es de 10 mil pesos.

A todo esto se tiene que sumar el pago de mantenimiento de las áreas comunes, que es de 130 pesos y, en su caso, 129 pesos más para el mantenimiento de capillas y monumentos.

Esto significa que una familia gasta de 4 mil 13 pesos a 10 mil 130 pesos por mantener los restos de su ser querido en un panteón municipal.

Los sitios más baratos

Se podría creer que los sitios más apartados a la capital del estado son los más baratos para los servicios funerarios municipales, pero no es así.

Tochimilco está a menos de dos horas de la ciudad de Puebla y los derechos de inhumación o construcción de bóvedas son menos costosos que en Xicotepec, al norte del estado y en la frontera con Veracruz.

En Tochimilco el servicio de inhumación cuesta 24 pesos y en Xicotepec 398 pesos, esto según las leyes de ingresos de los municipios.

De igual forma el permiso de construcción de bóvedas en Tochimilco es hasta cuatro veces más barato que en Xicotepec, aunque para la autorización de exhumar o desenterrar la diferencia es del 50 por ciento.

Aunque Tochimilco es muy barato para que descansen los restos de los poblanos, en Chigmecatitlán -en la zona de Izúcar de Matamoros- los gastos son aún menores.

Los derechos de inhumación son de tan solo 22 pesos y el permiso para la edificación de una cripta llega a los 80 pesos.

Costosas pero no tanto

Algunas localidades de la zona metropolitana son menos costosas que la ciudad de Puebla pero no tan baratas como Tochimilco o Chigmecatitlán.

Por ejemplo, en San Andrés Cholula el uso de los cementerios municipales es incluso más accesible que en Xicotepec, pues el costo es de 372 pesos, es decir, 26 pesos más barato.

En Amozoc el derecho para enterrar a alguien en el panteón del ayuntamiento cuesta 380 pesos; en San Gabriel Chilac, 184; en Zoquitlán, 63; en Zautla, 108, y Palmar de Bravo, 42 pesos.

En nueve de los diez municipios -que se eligieron al azar- es más costoso el permiso de construcción de una cripta que el derecho de inhumación, según puede apreciarse en las tarifas de los ayuntamientos.

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